Internacional.- Año con año cientos (probablemente miles) de deportistas alrededor del mundo protagonizan una gran cantidad de spots publicitarios para un número similar de marcas; sin embargo, estos mismos atletas son utilizados como embajadores de programas de buena voluntad, aún cuando muchos de nosotros no nos percatemos de ello, tal y como sucedió recientemente con Zlatan Ibrahimovic.
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Durante el pasado fin de semana el delantero sueco del Paris Saint-Germain, Zlatan Ibrahimovic, consiguió el primero de los goles con los que su equipo igualó 2-2 ante el Caen, acto tras el cual se despojó de la playera dejando ver su torso completamente tatuado y ganándose la tarjeta de amonestación como estipulan las reglas.
Aunque la acción realizada por el ex jugador de Juventus y Barcelona es sumamente común dentro del balompié, en esta ocasión acarreó una gran cantidad de criticas en contra del ariete debido a la sanción que le impedirá jugar el próximo partido del PSG dentro de la Ligue 1.
Sin embargo, un par de días después del incomprensible hecho, el atacante sueco ha revelado que el mostrar su torso desnudo durante el juego del fin de semana no se trataba de un simple festejo, sino de una acción encaminada a crear conciencia en torno a la pobreza alimenticia en la que viven más de 800 millones de personas en el planeta.
Pero ¿cómo es que el mostrar su cuerpo tatuado ayudaría a crear conciencia sobre este tema tan delicado?
La respuesta es sencilla. La mayor parte de los tatuajes que Zlatan mostró durante el fin de semana pasado eran temporales, y cada uno de ellos correspondía al nombre de una persona (50 en total) que viven actualmente en pobreza alimentaria.
Cabe destacar que la acción fue realizada como parte de una campaña del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidos, organismo para el cual el sueco es embajador, por lo que quizás en los días próximos la comisión disciplinaria francesa se tiente el corazón y perdone a Zlatan. Indudablemente una campaña de responsabilidad muy diferente a a todo lo que hemos visto.
