El nombre de Yasmín Esquivel, ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), es la principal tendencia en México este 24 de febrero. La razón: El País publicó que la jueza se doctoró en 2009 en la Universidad Anáhuac con un trabajo plagiado en al menos de la mitad de su extensión.
Según el medio, de las 456 páginas de su trabajo de titulación, 209 son idénticas a otros trabajos, incluído el libro “Los derechos fundamentales en México”, del jurista Miguel Carbonell.
La tesis de doctorado de Esquivel, siempre según el contraste hecho por El País, se corresponde con trabajos publicados antes por otros 12 autores.
Entre ellos, hay un ex rector de la Unam; un ex ministro español de Cultura; un ex presidente del Tribunal Supremo de España; y un ex presidente de la Corte Interamericana de DDHH.
Dos de los autores le confirmaron a El País sobre el plagio.
Hay que recordar que otra tesis de Esquivel, la que le dio la licenciatura en 1987, está siendo analizada por la Unam.
En un primer análisis, la alta casa de estudios ya dijo que se trata de una “copia sustancial” del trabajo de posgrado de otro estudiante, el que había sido presentado un año antes.
Yasmín Esquivel, otra vez en el centro de la escena
“En el caso de mi capítulo, lo he reconocido inmediatamente, es una reproducción textual, literal, de páginas y páginas. Ella no pone comillas, por lo tanto es un plagio de libro, lo que ha hecho es un corta y pega. Es evidente que lo que ha hecho es copiar directamente. Lo he visto enseguida. No es una cuestión sutil. Lo ha hecho de una manera muy burda”, le dijo a El País José Manuel Rodríguez Uribes, ministro de Cultura y Deporte español entre 2020 y 2021.
Hoy, Rodríguez Uribes trabaja como embajador ante la Unesco.
Esquivel habría tomado, sin citar, el texto “Rousseau y los derechos humanos” publicado por Uribes en “Historia de los derechos fundamentales” (Dykinson, 1998), una obra de gran envergadura escrita en conjunto con otros autores, los que también habrían sido objeto del plagio.
Carbonell, jurista mexicano, le confirmó al medio la copa a su libro “Los derechos fundamentales en México” que publicó en 2004. “Es plagio. Si entendemos por plagio el publicar con tu nombre un texto que tú no redactaste de manera original, es plagio. No hay otra manera de definirlo”, dijo el investigador.
Según El País, tanto Rodríguez Uribes como Carbonell ignoraban cuando se los consultó que la tesis era de la ministra de la Corte Suprema de México con la idea que sus opiniones fueran imparciales.
Sin contar el título, el índice, los agradecimientos y las bibliografías, el plagio equivale al 46,5 por ciento de las páginas escritas en la tesis.
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