De acuerdo con un informe publicado por The Wall Street Journal, Under Armour solía pagar la factura de las visitas de empleados y ejecutivos a clubes de striptease.
La práctica duró hasta febrero de 2018, cuando debido a las críticas internas, la compañía de ropa deportiva tomó la decisión de terminar con esta práctica y les envió un correo electrónico a los empleados informándoles que ya no estaba permitido.
Ahora, la compañía le dijo a CNBC que está abordando lo que calificó como “comportamiento inapropiado” y explicó que se esfuerza por crear un “lugar de trabajo respetuoso e inclusivo”.
El artículo de The Wall Street Journal explica que ejecutivos y empleados de Under Armour solían llevar a colegas y atletas a los clubes nocturnos y que “a menudo” la compañía pagaba la cuenta por estas salidas.
Todo cambió en febrero, cuando los empleados de la empresa recibieron un correo electrónico que decía que esta práctica ya no estaba permitida, según informó WSJ.
Esta semana, a CNBC, desde Under Armour no negaron los hechos y le dijeron a la cadena de TV que ya han enfrentado la situación y que la continuarán abordando para avanzar en un comportamiento apropiado en el lugar de trabajo.
Las visitas a clubes de striptease cargadas a las tarjetas corporativas se encontraban entre las prácticas de Under Armour que las mujeres de la compañía consideraban degradantes, según WSJ, citando a más de una docena de empleados actuales y anteriores.
Una carta enviada a los empleados este lunes por email fue conseguida por CNN Business y publicada en detalle. Allí, el CEO Kevin Plank y el presidente Patrik Frisk, les anticipan la publicación del artículo y lo describen como “difícil de leer”.
“Esta no es la cultura que imaginamos para Under Armour”, escribieron.
Plank y Frisk dicen que la compañía acelerará una “transformación cultural significativa” y que “podemos y lo haremos mejor”.
Esta es parte de la carta que Plank y Frisk enviaron a los empleados este lunes:
Queridos compañeros de la UA:
Liderazgo significa que cuando se enfrentan a críticas o acusaciones, la pregunta más importante que se deben hacer es si son merecidas. En Under Armour, somos dueños de nuestra verdad.
Les escribimos hoy en respuesta a un artículo publicado por el Wall Street Journal, que alega casos específicos de comportamiento inapropiado en el lugar de trabajo. Fue difícil de leer. Esta no es la cultura que imaginamos para Under Armour.
Creemos que existe una desigualdad sistémica en el lugar de trabajo global y aprovecharemos esta oportunidad para acelerar la transformación cultural significativa que ya está en marcha en Under Armour. Podemos y lo haremos mejor.
Mereces trabajar en un ambiente respetuoso y empoderador. El comportamiento inadecuado que desafía nuestros valores o viola nuestras políticas es inaceptable y no será tolerado. Creemos que nuestra diversidad y la decencia colectiva impulsarán nuestro futuro.
Más que el talento profesional y la experiencia que traes a Under Armour es quién eres como individuo: tu corazón, tus valores, tu historia. Tu voz es crítica y seguimos escuchándola con humildad y actuando con decisión. No podemos proteger esta casa si no nos protegemos unos a otros. Esta es la primera prioridad y responsabilidad del liderazgo. (…)
En medio de los “dolores” de crecimiento
Este tipo de novedades complican el marketing de la marca, que viene haciendo esfuerzos por volver a crecer de la misma forma que lo hacía cuatro o cinco años antes.
En efecto, como en 2017 vio una desaceleración en el crecimiento (mejoró apenas el 3 por ciento en sus ingresos respecto de 2016), replanteó su estrategia de marketing y, en lo que va de 2018, pareciera que le está dando resultado.
Entre otras acciones, hizo algunos ajustes en la estrategia de producción y comercialización, reduciendo drásticamente la cantidad de productos que ofrece e invirtiendo en desarrollo y logística.
La idea ha sido crear los productos más aceleradamente y llevarlos a los puntos de venta antes que la competencia: dos gigantes como Nike y Adidas.