c es el punto de partida de la mayor parte de las tácticas por parte de los profesionales en la materia y esa situación ha asumido un nuevo rol en el ecosistema digital, desde el punto de venta físico hasta lo que se hace por páginas web y redes sociales.
Sobre todo hoy en día, donde el contenido ha cobrado mayor valor en los esfuerzos comerciales de las marcas y empresas, ya que pueden ser un medio eficaz para conectar con el consumidor. De esta forma, entregar contenido digital puede ser ideal para conectar con los clientes incluso en el momento de la compra. El problema es que muchos profesionales no han tomado en cuenta los cambios y es una realidad que, para competir en el panorama digital actual, las marcas necesitan hacer algo más que simplemente enviar contenido a dispositivos móviles, tabletas y computadoras portátiles.
Las marcas deben ser omnipresentes para obtener su lugar como un elemento central de los consumidores. Mientras más relevante y específico sean, a un nivel personalizado, que se pueda integrar de una mejor manera con otros elementos digitales, crear una relación con los seguidores existentes de una marca será más fácil. Y para eso, hay que ser extremadamente creativos con las herramientas que se disponen, incluso, como lo puede ser el Wi-Fi.
De hecho, se puede aclarar que el Wi-Fi se ha aprovechado en estrategias desde antes de que se incrementara la utilización de smartphones. En su momento, el acceso inalámbrico a Internet público era visto como un atractivo para atraer a las personas a diferentes establecimientos, ya que funcionó como una “valla publicitaria” para anunciarse a los consumidores que buscaban hacer su trabajo de forma remota.
Según WeAreSocial, más de 4 mil millones de personas tienen conexión a Internet y poco más de 5 mil millones de ellas son usuarios de dispositivos móviles. Así, cuando se implementa correctamente, el Wi-Fi como eje estratégico aumentará la participación del cliente mediante la entrega de contenido digital interactivo, además mejora la experiencia que deja una marca con el usuario.
La mercadotecnia dirigida a los consumidores que se enfocan en esta pauta, más allá del punto de compra, ayuda a las marcas a formar más seguidores en los canales más utilizados. Las empresas también podrían usar el Wi-Fi para canalizar el tráfico web, empezar a formar una suerte de programa de lealtad e incentivar a los clientes a suscribirse.
Puntos a considerar al utilizar Wi-Fi como eje de una estrategia
- Crear contenido interesante de manera constate para atraer al cliente al punto de Wi-Fi
- Respetar la privacidad del usuario por medio de acceso únicos y continuos.
- Exponer otro tipo de oferta de valor, además del acceso a Internet.