De la misma manera que sucede con la mayoría de los jugadores en retail, Walmart se encuentra en búsqueda de adoptar una estructura mucho más ágil que le permita adaptarse con mayor rapidez a un entorno que es cada vez más digital, más inmediato.
En este orden de ideas, abandonar ciertos negocios y mercados así como poner a la venta ciertas marcas ha sido la constante.
A finales del año pasado, Walmart anunció que vendió su negocio en Argentina a la firma latinoamericana Grupo de Narváez.
Este movimiento, podría representar para Walmart perdidas por mil millones de dólares, luego de abandonar un mercado en el que estaba presente desde 1995 y en el que gestionaba más e 90 comercios con 9 mil empleados.
En la misma línea, en mayo pasado, el gigante minorista informó que desparecería su marca Jet.com, plataforma de comercio electrónico por la que habría pasado cera de 3 mil 300 millones de dólares y que, aunque fue un pilar para la transformación digital de la cadena, lo cierto es que perdió relevancia con el desarrollo de una tienda de e-commerce propia.
El adiós a una marca más en Latam
La marca de retail parece seguir por este camino y en horas recientes fue anunciado un acuerdo entre Walmart y Advent Internacional con Carrefour para vender Grupo BIG en Brasil.
Hablamos del tercer distribuir de alimentos más importante en aquel mercado cuya operación está valorada en cerca de 7 mil millones de reales brasileños (alrededor de mil 100 millones de euros), importe que sería pagado en un 70 por ciento en efectivo y un 30 por ciento en acciones.
Con operaciones en Brasil desde 1995, esta marca que ahora desparece de la estructura de Walmart, cuenta con 387 establecimientos en distintos formatos, que van desde los cash&carry de Sam’s Club hasta los hipermercados y supermercados Big, pasando por tiendas de conveniencia y discount, lo que el año pasado le permitió obtener ventas brutas por cerca de 24 mil 900 millones de reales (3 mil 820 millones de euros).
Con esta compra, Carrefour consolida su presencia en el mercado brasileño el cual representa el segundo mercado del minorista francés, al desarrollar un negocio que puede ser similar al de sus operaciones en Europa fuera de Francia.
¿Un buen momento para comprar?
Con una economía que se recupera a paso lento, para muchos la compra de activos podría ser un error; no obstante, estas condiciones para algunas marcas son una oportunidad para adquirir negocios, marcas y unidades que les permitan crecer a mediano plazo en mercados, categorías o segmentos que se ubican como claves en su negocio.
Algunas marca reconocen esta oportunidad y han comenzado a mover sus fichas. Tal y como lo indican desde The Economic Times, con este movimiento, Bimbo se haría de la marca Modern Breadm marca principal de Everfoods, que cuenta con una red de 40 plantas de producción y más de 80 mil puntos de venta.
Adicional, esta firma que fue comprada por Everstone durante 2016 a Hindustan Unilever, cuenta con Cookie Man, una fabricante minorista de galletas y productos de panadería australianos que suma a su red 50 puntos de venta en el país y del que tiene la licencia para comercializar sus productos en regiones como Sri Lanka, Nepal, Bangladesh y Mauricio.
De concretarse esta compra, Bimbo estaría ganando un terreno importante en India, mercado en el que incursionó hace apenas dos años y que ha registrado interesantes tasas de crecimiento a su negocio.
Del otro lado de la moneda, para empresas como Walmart el desprendimiento de ciertos activos les permite concentrar esfuerzos y recursos en negocios que podrían dejar mejores y mayores resultados en el mediano plazo.
En el caso de este minorista, recordemos que además de una fuerte apuesta en e-commerce, la estrategia parece estar ligada a la publicidad digital, en donde ya ha anunciado planes y movimientos con los que se quiere convertir en un referente.