La marca de juguetes VTech que el año pasado sufrió una brecha de seguridad en miles de sus juguetes conectados, ha reaccionado solicitando a los padres que acepten la responsabilidad de que este tipo de situaciones pueden darse y que ha que entenderlo.
La reacción de la empresa ha molestado a muchos padres, pues el fallo de seguridad expuso los datos de adultos y niños y en respuesta los progenitores están llamando a realizar un boicot a la marca.
Y es que entre las nuevas condiciones de uso de los productos conectados para niños, han agregado que cualquier dato que se brinde, se hace a “su propio riesgo”, además de agregar que “al reconocer esto, usted entiende y acepta que ni VTech o sus socios o empleados podrán ser objeto de demandas por su parte… por daños de ningún tipo.”
Para finalizar, las condiciones agregan “Su conocimiento y aceptación de que cualquier información que usted o reciba durante el uso del site puede no ser segura y puede ser interceptada o luego adquirida por entes no autorizados”.
En pocas palabras, no se hacen responsable por la información que se les envía y pasan el balón a los padres para que sean ellos los únicos responsables. Con una propuesta como la anterior, no es de extrañar que la reacción de los progenitores no haya sido positiva.
Y es que es la inmensa mayoría entiende que este tipo de fallos pueden ocurrir, pero de allí a que endilguen al cliente toda la responsabilidad, cuando el sistema lo administran y mantiene la marca, para proveer un servicio por el que cobran, parece poco adecuado como estrategia.