• En las encuestas anteriores, el porcentaje de participación ha logrado alcanzar apenas el 8 por ciento.

• Durante las últimas semanas, las calles de México se han visto inundadas de propaganda a favor del mandatario.

• Una particular estrategia de marketing político bien planeada y ejecutada sigue mostrando sus resultados.

La revocación de mandato 2022 está a nada de comenzar, poniendo en conflicto a la población sobre si es mejor votar o no votar.

De acuerdo con información del Instituto Nacional Electoral (INE), el ejercicio de revocación de mandato es el instrumento de participación solicitado por la ciudadanía para determinar la conclusión anticipada, la cual en esta ocasión será llevada a cabo el día 10 de abril para consultar el futuro del presidente de la república (y del país), Andrés Manuel López Obrador.

A pesar de que presuntamente la población mexicana es la que decidirá el futuro camino del país, esta es parte de la estrategia de marketing político en la que viene trabajando AMLO desde hace años atrás, donde busca “dar al pueblo” las decisiones sobre la senda de la nación, como bien lo fue en su momento la rifa sobre el avión presidencial comprado por Peña Nieto que optó por “rifar” y luego vender; así como también la supuesta consulta para determinar el futuro del proyecto ya cancelado del Aeropuerto de Texcoco, el que después se convirtió en el proyecto del Aeropuerto Nacional Felipe Ángeles (AIFA).

Este tipo de acciones por el mandatario han logrado llamar constantemente la atención de los mexicanos, quienes se encuentran en una continua disputa sobre la efectividad, credibilidad y aceptación del gobierno actual, donde existen dos bandos en los que prácticamente el mismo presidente se encarga de recalcar constantemente.

En cuanto a fines estratégicos y de marketing, AMLO logró un sinfín de aciertos detrás, ya que apostó por dirigir sus decisiones para mejorar su percepción ante la mayoría del país, hecho que lo llevó a posicionarse en sus ya clásicas conferencias mañaneras, pero ¿logrará mantenerse ahí?

¿Votar o no votar?

Durante las últimas semanas hemos visto por todos lados todo tipo de propaganda a favor de que AMLO se mantenga presente en el poder, a pesar de que esto va en contra de los señalamientos de la veda electoral; en contraparte, la propaganda en su contra ha sido prácticamente inexistente, a menos de que estuviésemos hablando sobre las redes sociales, pero ya podemos darnos una breve idea de cómo va a ser el final de la historia.

A pesar de esto, para que el resultado de la votación sea de valor, esta debería de contar con al menos el 40 por ciento de participación del electorado y, teniendo en cuenta que su primer encuesta sobre el amparo de la legislación votó menos del 8 por ciento de la población, un cambio en la dirección nacional no suena cerca de suceder.

Asimismo, de acuerdo con un sondeo de la Consulta Mitosfky en la primera semana abril, la aprobación del presidente es del 60.4 por ciento de la población, hecho el cual de entrada ya representa una mayoría que no se podría erradicar, a menos que sucediera un hecho histórico.

Los datos anteriores dejan en claro la más próxima realidad, pero ¿qué sucedería si AMLO pierde en la votación? De acuerdo con información de medios locales, Dania Ravel, consejera electoral del INE, muestra dos artículos que nos hacen imaginar qué es lo que sucedería si la mayoría votara por la revocación de AMLO:

“El artículo 84 de la Constitución establece que la persona que ocupe la presidencia del Congreso de la Unión asumirá provisionalmente la titularidad del Poder Ejecutivo [presidencia del país] para que, en los 30 días siguientes, el Congreso nombre a quién concluirá el período”.

“El artículo 9º de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, por su parte, declara que “el Congreso General, constituido en Colegio Electoral, con la concurrencia de por lo menos las dos terceras partes del total de sus miembros, nombrará Presidente interino de la República. El nombramiento se otorgará en escrutinio secreto y por mayoría de votos de los miembros presentes”.

Morena y sus aliados aún cuentan con más de la mitad de los representantes de la Cámara, por lo que si AMLO perdiera en esta votación, lo más probable es que otro sucesor del partido tomaría su lugar hasta que se dieran las próximas elecciones presidenciales que se presentarán hasta el 2024.

Teniendo esto en consideración, Luis Carlos Ugalde, director general de Integralia Consultores y ex consejero del IFE, menciona que no se trata de más que otra estrategia de marketing político de López Obrador:

“Yo soy crítico del gobierno como muchos otros, pero eso no significa que quiera que deje su puesto ahora. Pero si voto para que se quede, el presidente dirá que estoy a favor de su gobierno. No me veo representado en las opciones y por eso creo que la abstención es la mejor forma de participar”.

¿Por qué no votaré en la consulta de revocación de mandato? pic.twitter.com/BoZODVojGT

— Luis Carlos Ugalde (@LCUgalde) April 9, 2022

Asimismo, teniendo en cuenta el historial de la estrategia de AMLO para mantenerse con una imagen “a favor del pueblo”, las votaciones pueden ser otro ejercicio más de consultas de las cuales ya sabemos el resultado, pero le funciona para enaltecer su imagen ante su respectivo público.

Cada quien es libre de decidir si va o no a votar, pero no queda en duda que toda la estrategia detrás de este evento ha mostrado sus frutos.

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