La disputa entre los distintos jugadores de la industria del automóvil es más dura que nunca. En plena transformación hacia los vehículos eléctricos, a las grandes fabricantes como Toyota, Ford, Nissan y Volkswagen se sumó Tesla y el escenario está congestionado.
Para los expertos, estos años serán clave para saber qué marcas serán las ganadoras y cuáles terminarán derrotadas en la carrera por liderar el recambio tecnológico.
La última novedad en este mercado llega desde Alemania, donde el gigante teutón Volkswagen reconoció que Tesla, una marca novata pero potente, la está obligando a acelerar su transformación a una velocidad mayor a la planeada.
“No hay dudas de que debemos abordar la competitividad de nuestra planta en Wolfsburg con la llegada de nuevos jugadores al mercado”. Las palabras son de Michael Manske, máximo representante de comunicación del Grupo Volkswagen, en referencia al marketing de Tesla y su llegada a Berlín.
Este fin de semana, Elon Musk, CEO de la compañía californiana (que ahora se trasladará a Texas), estuvo en Alemania para liderar la presentación en sociedad de la primera gigafactory en Europa.
Antes de un mega show donde los encargados del marketing de Tesla no ahorraron en gastos, Musk dijo que planea producir entre 5.000 y 10.000 vehículos semanales, un número que podría asustar a la marca más encumbrada, como lo es VW.
Manske también hizo referencia a la llegada de carros eléctricos desde China, hecho que también preocupa a la compañía alemana.
“Tesla está estableciendo nuevos estándares de productividad y escala en Grunheide”, dijo Manske refiriéndose a la fábrica cerca de Berlín que producirá más del doble de la totalidad de vehículos eléctricos que se produjeron en Alemania en todo 2020.
Sin embargo, Manske negó un informe publicado en el medio alemán Handelsblatt esta semana que dice que el director ejecutivo de Volkswagen, Herbert Diess, adelantó en una reunión interna que la transición a los vehículos eléctricos costará 30 mil puestos de trabajo en VW.
Aunque dijo que Volkswagen no iba a comentar sobre las especulaciones del periódico, dijo que un recorte de 30 mil puestos de trabajo “es algo absurdo y sin fundamentos”.
Lo cierto es que los carros eléctricos tienen muchas menos piezas que un automóvil de combustión interna y, por ende, necesitan menos trabajadores para producirlos.
De acuerdo con una estimación, para 2025 se podrían perder 100 mil puestos de trabajo en la industria automotriz global producto de la transformación eléctrica.
La planta de Volkswagen en Wolfsburg, la más grande del mundo con más de 50.000 empleados, no fabrica vehículos eléctricos, pero la compañía planea producir allí un sedán eléctrico desde 2026. Es un proyecto llamado “Trinity”.
Tesla, Volkswagen y el valor de marca