No es por falta de imágenes ni por falta de creatividad. Esta fue la justificación que entregó Vogue Italia a sus lectores ante una portada que se luce totalmente blanca.
Dentro de sus redes sociales, la reconocida publicación anunció la portada que este mes dará rostro a sus contenidos y la sorpresa es que se trata de una carátula totalmente vacía.
Un mensaje contundente
Vogue es reconocida por sus impactantes portadas, en donde personalidades de todo el mundo han aparecido con increíbles vestuarios y detallada producción en términos de producción.
Pero ahora, como una manera mostrar respeto ante la situación que enfrenta Italia así como el resto del mundo ante la pandemia, la publicación ha decidido lanzar una carátula que deja de lado todo el glamour.
Lo más interesante es el texto que acompaña a esta imagen, en el cual la revista explica que no hay nada podría hablar de nada mientras miles de personas mueren el mundo y hay otros millones más que trabajan para detener la pandemia. Al mismo tiempo, explica el significado que el banco en su portada tiene.
De esta manera, en una publicación de la cuenta oficial de Vogue Italia se lee:
“En su larga historia que se remonta a más de cien años, Vogue ha atravesado guerras, crisis, actos de terrorismo. Su tradición más noble es nunca mirar para otro lado.
Hace poco menos de dos semanas, estábamos a punto de imprimir un problema que habíamos planeado durante algún tiempo, y que también involucró a L’Uomo Vogue en un proyecto gemelo.
Pero hablar de cualquier otra cosa, mientras las personas mueren, los médicos y las enfermeras arriesgan sus vidas y el mundo cambia para siempre, no es el ADN de Vogue Italia. En consecuencia, archivamos nuestro proyecto y comenzamos desde cero.
La decisión de imprimir una portada completamente blanca por primera vez en nuestra historia no se debe a la falta de imágenes, sino todo lo contrario. Lo elegimos porque el blanco significa muchas cosas al mismo tiempo.
El blanco es ante todo respeto. El blanco es renacer, la luz después de la oscuridad, la suma de todos los colores. El blanco es el color de los uniformes usados por aquellos que arriesgan sus propias vidas para salvar las nuestras.
Representa el espacio y el tiempo para pensar, así como para permanecer en silencio. El blanco es para aquellos que están llenando este tiempo y espacio vacío con ideas, pensamientos, historias, líneas de verso, música y cuidado por los demás. El blanco recuerda cuando, después de la crisis de 1929, este color inmaculado fue adoptado para la ropa como una expresión de pureza en el presente y de esperanza en el futuro.
Sobre todo: el blanco no es rendirse, sino una hoja en blanco a la espera de ser escrita, la portada de una nueva historia que está por comenzar”.
En línea con las demandas
Si bien la portada de una revista no puede ser considerada como una ejecución publicitaria como tal, la realidad es que se trata de un elemento que para los medios juega sobre esta línea.
Según un estudio del Wall Street Journal, una persona dedica ocho segundos a mirar la portada de cualquier publicación, tiempo que es suficiente para incidir en comprar el título o no.
En este sentido, resulta arriesgada estrategia de Vogue. Si no se tiene el contexto d ellas líneas escritas en sus redes sociales, la portada puede decir poco, aunque no deja de ser impactante.
Lo cierto, es que la decisión de la firma está en línea con las demandas de las audiencias entendidas como consumidores. De acuerdo con un estudio publicado por Edelman, el 84 por ciento de los encuestados espera una publicidad centrada en cómo las empresas están ayudando a las personas a enfrentar la pandemia, mientras que el 78 por ciento prefiere que estas hablen sobre productos únicamente si demuestran que son conscientes de la crisis.
Con esta ejecución Vogue demuestra que construir una marca no está peleado con entender una crisis de las dimensiones que el COVID-19 ha tomado a lo largo y ancho del mundo.
