Se ha hablado tanto del doctor Hugo Pérez-Gatell, que ya parece un exceso tratar de analizar sus controvertidas respuestas a la prensa. Por ejemplo, cuando se le preguntó, en conferencia de prensa, por la “sugerencia” que había hecho el director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), doctor Tedros Ghebreyesus, acerca de que México debía tomar en serio a la pandemia, declaró que no lo había hecho en específico para nuestro país, sino que era una “recomendación general”, lo cual es totalmente falso, como puede observarse fácilmente en el video correspondiente.
Pero a López-Gatell, y al gobierno en general, empezando por el primer mandatario, les cuesta mucho trabajo procesar las sugerencias o recomendaciones no solo externas, sino a veces incluso las provenientes del mismo gabinete presidencial o del gabinete extendido.
Lo cierto es que la pandemia de Covid-19 en México está pasando por niveles críticos, tanto por el aumento en número de contagios como en fallecimientos, con 10 estados a punto de pasar a semáforo rojo y con la capital mexicana, la Ciudad de México (CDMX), en “semáforo naranja al límite”.
Recordemos que si la capital mexicana no está en rojo, solo es por la amable “sugerencia” que le hizo el presidente Andrés Manuel López Obrador a la jefa de Gobierno capitalina, Claudia Sheinbaum, el pasado viernes 04 de diciembre, durante la conferencia mañanera, cuando leyó su decálogo contra el Covid-19. A cambio, el primer mandatario le prometió aumentar la capacidad hospitalaria de la ciudad. De hecho, ya ha llegado personal médico proveniente de las entidades con semáforo verde, como Campeche, por ejemplo, para ayudar en el combate a la pandemia.
Una esperanza a medias
Por donde se le quiera ver, la situación es crítica en el área de la salud. Nuestro país rebasa ya las 110 mil defunciones y acumula más de un millón 200 mil casos confirmados, con la promesa de 250 mil dosis de la vacuna de Pfizer para este mismo mes de diciembre, pero como se requieren dos dosis por persona, ésta será solo para 125 mil médicos y enfermeras del personal de salud, de la primera línea de combate a Covid-19.
Como hemos reiterado en este mismo espacio, la vacuna de Pfizer requiere de una cadena de frío con ultra refrigeradores que logren temperaturas de entre -80 y -70 grados centígrados, aunque una vez descongeladas, se pueden mantener en hielo seco hasta cinco días. Lo anterior no será nada fácil, pues este tipo de refrigeradores no es nada común, aunque sí los hay en algunas universidades e institutos que realizan investigación, para lo cual el gobierno ya está haciendo un censo de la infraestructura existente.
Pero la esperanza para el país no viene solo de la vacuna de la estadounidense Pfizer y la alemana BioNtech. También, si todo sale bien, pronto estarán disponibles vacunas que han mostrado una alta efectividad, provenientes de la compañía farmacéutica china CanSino (de la cual actualmente corre un protocolo de investigación de fase 3 en México), así como de la británica AstraZeneca, y quizás, también se sume la de la belga-estadounidense Janssen.
Birmex, sin experiencia probada en el área logística
Otro gran reto que enfrentará el país será la distribución en tiempo y forma de las diferentes vacunas, pues la empresa estatal Birmex, que en adelante fungirá como la distribuidora oficial de medicamentos, vacunas e insumos médicos, no tiene experiencia probada en logística y entregas, además de que hay un temor fundado de que el crimen organizado pretenda robar las vacunas para Covid-19, ante lo cual se ha dicho que será el Ejército quien custodiará las dosis.
Empero, vienen grandes retos para el sector salud en 2021. Uno de ellos será la producción, autorización, distribución y entrega de las vacunas, en tiempo y forma, además de hacer el proceso de la forma más ordenada posible, cumpliendo todos los protocolos y medidas sanitarias, lo que de entrada se ve muy complicado, pues ni siquiera la vacuna contra la influenza ha podido ser aplicada correctamente, tanto por la alta demanda que se ha dado en este 2020, como por el desabasto de la misma.
El otro gran desafío, también comentado aquí, será la entrega y distribución de medicamentos traídos del exterior por la UNOPS, los cuales serán aprobados como trámite exprés, en tan solo cinco días, por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), que en algún momento recibió certificaciones mundiales de la OMS y Organización Panamericana de la Salud (OPS) y se convirtió en agencia de referencia internacional, pero ahora tristemente solo será una oficina gubernamental “pone sellos” de medicamentos que no está garantizando nadie, como lo advirtió la Organización de las Naciones Unidas (ONU) desde el principio, así que en el futuro nadie se diga engañado.
El botiquín
Si estamos pensando que el gobierno cuidará de nosotros, estamos muy equivocados, así que lo mejor será cuidarnos a nosotros mismos al máximo. Si puede, evite salir de casa, y si no le es posible, por favor use correctamente el cubre nariz y boca, mantenga la sana distancia en todo momento, y sobre todo, en este mes de diciembre, no organice ni vaya a reuniones ni con amigos ni familiares, porque los contagios y hospitalizaciones están en aumento, en especial en la capital mexicana.