La Paz, Bolivia.- El videojuego llamado “Ghost Recon”, de la empresa francesa Ubisoft, retrata a Bolivia como un narcoestado. Por esto, el gobierno de Evo Morales protestó ante el embajador de Francia en La Paz.
Mientras Bolivia lucha, por lado, para combatir el narcotráfico y, por otro, para crecer como destino turístico, un videojuego francés no ayuda en nada.
Se trata del juego “Ghost Recon Wildland“, de la compañía francesa Ubisoft, que fue criticado por el gobierno boliviano por tratar a ese país como un “narcoestado”.
La protesta es formal y se hizo efectiva este miércoles directamente al embajador francés en La Paz, Denys Wibaux.
“La cancillería boliviana pidió a Wibaux que comunique a la empresa que el producto daña la imagen del país”, dijo el ministro de Gobierno, Carlos Romero, a periodistas tras una conferencia de prensa.
En el videojuego se muestran distintos sitios geográficos bolivianos y símbolos patrios, siempre vinculados con el narcotráfico. “Hemos hecho llegar una carta al embajador de Francia dirigida a esa empresa privada, para que ellos puedan intervenir. En todo caso, nosotros nos reservamos el derecho de iniciar las acciones legales”, agregó Romero.
El desarrollo de “Ghost Recon” lleva a los jugadores a una realidad ficticia del futuro, en la que el país sudamericano se ha convertido en el mayor productor de cocaína del mundo. En la fantasía del juego, el influyente cartel de la droga de Santa Blanca convierte al país de Evo Morales en un “narcoestado”, “sin ley, dominado por el miedo, la injusticia y la violencia”.
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— Pablo Gutiérrez (@angelbless45) 2 de marzo de 2017
Paradoja francesa
Paradójicamente, Francia es el principal proveedor de maquinaria para combatir el narcotráfico en Bolivia. “Con tecnología francesa estamos combatiendo el narcotráfico. De ahí son nuestros helicópteros Súper Puma y otros equipos”, dijo Romero, aclarando que además le comprarán a Francia nuevos radares para evitar vuelos de avionetas que transportan droga a Brasil y Paraguay.