La buena reputación de una marca se construye con base en las acciones que emprende como organización, pero también la gente que la conforman, esto es un valor agregado que no se mide de manera inmediata, sino que se refleja con el tiempo tanto en una imagen positiva ante el consumidor como en beneficios económicos.

Su relevancia es a tal grado, que el 80 por ciento del valor total de una empresa reside en la buena gestión de sus activos y recursos intangibles, de acuerdo con Corporate Excellence – Centre for Reputation Leadership.

Samsung es una de las marcas que cuentan con una buena reputación corporativa, pero los incidentes registrados el año pasado con el Galaxy Note 7 y algunos modelos de sus lavadoras, afectaron su imagen, derivando en desconfianza del consumidor.

La compañía surcoreana ha trabajado arduamente para recuperar la confianza ante el público, algo que había podido lograr poco a poco a través de diversas acciones para reforzar la imagen de la marca. Sin embargo, ahora enfrenta otra situación que podría afectar su imagen nuevamente.

Lo anterior debido a que Lee Jae-yong, vicepresidente de Samsung, quien además es hijo del presidente del gigante electrónico, será interrogado como sospechoso en el escándalo de corrupción en relación al caso que provocó la destitución de la presidenta de Corea del Sur, Park Geun-hye.

De acuerdo con un portavoz de la Fiscalía surcoreana, Lee comparecerá mañana -jueves- como sospechoso de un delito de soborno. Medios internacionales dan cuenta que otros dos directivos de Samsung fueron interrogados el lunes en calidad de testigos por los fiscales encargados de la instrucción.

¿Por qué es importante y puede significar un impacto negativo para Samsung? Debido a que el heredero del gigante de electrónica está al frente de la empresa desde 2014, cuando su padre, Lee Kun-hee, sufrió un infarto que aún lo mantiene hospitalizado y sin habla.

Jae-yong ocupa el tercer puesto en la lista de los más ricos de Corea del Sur, con un patrimonio de 6.200 millones de dólares, de acuerdo con información de Euronews.

El problema es que la investigación relaciona a Samsung con acuerdos ilícitos entre el gobierno y la compañía, uno de los contratos que se investigan es uno por valor cercano a los 18,3 millones de dólares con una compañía con sede en Alemania propiedad de Choi y dio además apoyo financiero para que su hija, según reportan diversos medios.

El papel que juegan los altos directivos de grandes marcas puede jugar en favor y en contra de la imagen de las mismas. Un mal accionar puede repercutir al interior de las organizaciones y derivar en la salida de muchos de ellos. Algunos casos que se han dado en el último año se encueran la renuncia del CEO de Ericsson, Hans Vestberg, tras múltiples cuestionamientos sobre su gestión por parte de diversos medios suecos que esgrimieron críticas a su liderazgo y el monto de su salario.

En cuanto a escándalos que motivaron la salida de altos ejecutivos es el caso del presidente de Mitsubishi Motors, Tetsuro Aikawa, y de su vicepresidente, debido al escándalo de manipulación de datos de consumo de varios de sus modelos.