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Las ventas online son una de las mejores formas de llegar a los consumidores en cualquier momento y lugar
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Asimismo, ante la pandemia de COVID-19, permite continuar el consumo incluso sin una interacción física
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Por otro lado, habilita a las personas llegar a tener una experiencia omnicanal
Rápidamente el ecommerce se ha vuelto una atractiva oportunidad para las marcas. Solo en México, de acuerdo con Statista, las ventas online alcanzan ingresos por nueve mil 40 millones de dólares (mdd). Y en términos generales, de acuerdo con Invesp, ya representan el 8.8 por ciento del gasto global en retail. Pero se puede esperar que esta situación mejore aún más.
Con la situación de la COVID-19, muchas marcas ha salido por desgracia muy afectadas por la paralización económica. Entre ellas, ciertas representantes del sector retail. Quienes pudieron escapar este destino son las que supieron adaptarse a las ventas online. ¿Tu negocio también les quiere sacar ventaja? De acuerdo con Hubspot, debe de seguir los siguientes consejos:
¿Qué producto quieres llevar a las ventas online?
Es importante responder a esta pregunta, no solo para identificar qué parte del portafolio de ofertas es el que más se puede ajustar a una estrategia ecommerce. También es importante que las compañías que estén dispuestas a conocer a profundidad su producto. No solo por simple compromiso hacia el negocio, sino también para poder dar un mejor servicio al cliente.
Las ventas online requieren que las empresas tengan un conocimiento muy profundo del producto. Esto, simplemente por el hecho que la gente no puede ni probar ni ver en persona el servicio o el bien que buscan adquirir. En este sentido, para poder concretar una transacción, la empresa necesita una descripción detallada y profunda del portafolio, más allá de un guión.
Optimizar la presencia en canales digitales
Por definición, las ventas online recaen de forma muy importante en la presencia de la marca en cuestión dentro de las plataformas web. Tiene sentido, si se hace una comparación con las ventas retail tradicionales. Los productos más deseados serán los que están en las mejores posiciones de una tienda o de una calle. Así lo mismo sucederá con los bienes en ecommerce.
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Entre las cosas que deben de tomar en cuenta las empresas para las ventas online, es que se deben escoger los canales adecuados de promoción. Existen redes sociales, buscadores de web y muchas otras herramientas que están a disposición de las compañías para mover sus productos. La idea es hallar el que mejor se ajuste a las necesidades puntuales del negocio.
Crear contenido de valor que fomenten las ventas online
Una tendencia que aplica tanto a retail tradicional como al ecommerce y la comercialización de servicios es que el contenido es rey. Los consumidores se convirtieron en agentes proactivos en su relación con las marcas. En este sentido, la forma en la que se puede vender mejor casi cualquier oferta es a través de recursos atractivos que capturen la atención del público meta.
Para ello, se necesita que las marcas piensen a la perfección qué tipo de contenidos son los que más pueden llamar la atención de los consumidores. Claro, hay recursos que son en general más efectivos que otros, como los videos. Sin embargo, no se trata solo de formatos. También es crucial cuidar el objetivo de la narrativa y el tipo de discurso que se va a usar.
Implementar mejores herramientas
Más allá de asegurar buenas técnicas para llamar la atención de los consumidores, también es importante de hecho completar las ventas online. En este sentido, es importante recordar que la experiencia del cliente es muy importante para concretar esa transacción. Y lo anterior, en especial en las interacciones digitales, tiene mucho que ver con la tecnología y los sistemas.
Así pues, es crucial que las compañías utilicen las herramientas más modernas. Esto incluye tanto sistemas que permitan personalizar las sugerencias de compra hasta los sistemas de pago disponibles. Eso sin contar que las ventas online además deben cuidar que la conexión sea prácticamente infalible. Lo anterior implica una gran inversión en toda la infraestructura.