• Si cuidas tu perfil de Facebook, puedes hasta conseguir trabajo.

• Tener a tus jefes en Facebook u otras redes puede ser un dilema complicado.

• En redes sociales puedes conocer a muchas personas, incluyendo contactos profesionales.

Las redes sociales pueden ser un arma de doble filo en el ambiente laboral. Hoy se vuelve un poco más complejo, dado que muchos trabajos requieren de ellas, pero debes usarlas sabiamente. Primero que nada, no se deben convertir en una distracción que termine por hacerle daño a tu productividad. Recuerda que las redes se hicieron para entender nuestros gustos y personalidad y mantenernos en ellas el mayor tiempo posible, donde de vez en cuando nos lanzan anuncios. Ese es el negocio. Pero así como puedes ser un consumidor pasivo, tú también las puedes usar en tu beneficio y existen muchas ventajas y desventajas de las redes sociales en tu trabajo. Son más complejas de lo que crees, así que sácales el mayor provecho.

Y pensar que hace unos años las redes sociales ni siquiera existían. Son medios relativamente jóvenes, pero el crecimiento exponencial de la tecnología hace parecer que ya llevamos décadas con ellos. Hemos llegado al punto en el que no podemos concebir nuestra vida sin Facebook, Twitter o Instagram y esto puede ser bueno o malo, pero de que afecta tu vida laboral lo hace. Seguramente fue ahí donde encontraste el trabajo que hoy tienes o muchos de tus amigos en redes los conociste en alguna oficina. Son también el medio donde publicas quizá muestras de tu profesión para que tus conocidos las vean. Y las empresas van a buscar “stalkearte” en algún momento para conocerte más. Si todavía no entiendes su poder, tal ves estos ejemplos te ayuden.

Haz un buen perfil

Si cuidas tu perfil de Facebook, puedes hasta conseguir trabajo. Revísate y actualízate: tu correo electrónico, tu formación académica, tus familiares, las ciudades donde has vivido y donde vives, tu teléfono, etc. De la misma forma, cuida todo lo que publicas. ¿Cómo se ve tu perfil público? Verifica esta parte y deja todo limpio para que se encuentren con la imagen de alguien a quien quieren contratar.

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No te distraigas

El lado malo de las redes es la distracción que suponen. Al desactivar las notificaciones de tu celular, verás que el tiempo que estás ahí se reduce. Si tu trabajo requiere que te mantengas conectado, de ser posible trata de hacerlo desde tu computadora y deja tu celular a un lado. Por otro lado, tal vez evitar las distracciones es más simple de lo que crees, con una agenda común, donde anotes qué actividades requieren de tu atención inmediata.

¿Agregar a tus jefes?

Tener a tus jefes en Facebook u otras redes puede ser un dilema complicado. Si no quieres ofender a nadie, tal vez lo mejor y más sencillo sea ser claro y directo: dile a tu jefe que no quieres mezclar tu vida personal con la profesional. Otra solución muy sencilla es configurar tu privacidad, como ya mencionamos antes.

Ayuda para comunicarse

WhatsApp es una herramienta que cada vez se usa más en los trabajos, pues puede ayudar en aspectos como la buena retroalimentación. Si el área de recursos humanos mantiene un WhatsApp abierto como un buzón para todos, por ahí pueden llegar dudas, comentarios y quejas que se pueden atender de manera rápida y personalizada.

Crea contactos

En redes sociales puedes conocer a muchas personas, incluyendo contactos profesionales. LinkedIn se hizo precisamente para eso. Ten en claro dónde te gustaría trabajar, busca a las personas involucradas con dichas empresas y agrégalas a tu red de contactos. Todos ellos pueden ser personas clave para lograr alcanzar el trabajo de tus sueños. Por otro lado, no descuides LinkedIn, actualízalo constantemente y crea nuevas publicaciones para mantenerte vigente.