La venta de marihuana libre en Uruguay tiene un mes de aplicación y el sistema funciona dentro de lo planeado. Creció la cantidad de inscriptos al listado, paso previo necesario para luego poder ir a comprar las cantidades autorizadas por mes en las farmacias.
Al comienzo se formaron largas filas para comprar el producto, y sus existencias se agotaron rápidamente, pero con el paso de los días, y superada la euforia inicial, todo se normalizó.
Sin embargo, hay un problema: al menos tres bancos privados de capitales extranjeros amenazan con clausurar las cuentas de las farmacias que se dedican al expendio de cannabis. Por esto, algunos de los puntos de venta analizan salir del programa.
Según publicó The New York Times, “los bancos estadounidenses, entre ellos Bank of America, dijeron que dejarían de realizar negocios con los bancos de Uruguay que ofrezcan sus servicios a comercios dedicados a la venta de marihuana controlada por el Estado”.
La marihuana “se vendía como pan caliente hasta que intervinieron los bancos estadounidenses” https://t.co/zHk5c5xpHE pic.twitter.com/2T7YL636W8
— Montevideo Portal (@portalmvd) 29 de agosto de 2017
La complicación es la misma que enfrentan los negocios de este tipo en los estados de Estados Unidos en los que se legalizó el cannabis medicinal y recreacional. “Bajo la Ley Patriota, aprobada después de los ataques del 11 de septiembre de 2001, es ilegal para las instituciones financieras de Estados Unidos hacer negocios con distribuidores de ciertas sustancias controladas, incluida la marihuana. Las medidas fueron diseñadas para frenar el lavado de dinero y el tráfico de drogas”, explica NYT.
El problema es serio y amenaza con hacer fracasar todo. Ya hubo reuniones entre las autoridades del Instituto de Regulación y Control de Cannabis y la Junta Nacional de Drogas para analizar soluciones. “Hasta tanto no cambie la normativa internacional, es muy complejo. Por tanto, debido a que los bancos no son una opción viable, se podría tener como alternativa que las farmacias usen redes de cobranzas o cooperativas dentro del Banco Central”, dijo a el diario El País Pablo Durán, abogado del Centro de Farmacias.
Según NYT, la solución que hallaron en algunos negocios de marihuana en estados como Colorado y Washington es optar por “mantenerse como comercios que usan exclusivamente efectivo, sin tarjetas de crédito no cuentas bancarias”.
Pero no son sólo los bancos de origen estadounidense, Esteban Riveira, dueño de la farmacia Pitágoras, en Montevideo, le dijo a Ambito Financiero que el Banco Santander (de capitales españoles) le cerró la cuenta que tenía hace 25 años. “En un principio, en las cartas no esgrimían los motivos. Pero como ahora se hizo público, no ocultaron que es por la venta de marihuana”, dijo.
“No le veo futuro al proyecto. El Estado hace todo lo posible, pero los bancos hoy en día dirigen el mundo. Y, al contrario de lo que pasaba al comienzo, ya no hay tantos interesados en vender”, agregó Riviera.