• En 2021, la oficina doctrinal del Vaticano determinó que los sacerdotes católicos no pueden bendecir uniones de personas del mismo sexo.
• La respuesta se hizo por el pedido de aclaración de varias diócesis.
• Este martes, desoyendo aquella decisión, un grupo de obispos flamencos propusieron un ritual de bendición que incluye una oración para la unión estable de personas de un mismo sexo.

En un documento hecho público este martes 20 de septiembre, los obispos católicos flamencos decidieron avalar de manera explícita la bendición de la unión de personas homosexuales, en lo que es visto como un desafío al Vaticano, que en 2021 emitió una sentencia contra esas prácticas desde la oficina doctrinal.

El documento, que tomó estado público a través del sitio web de la Conferencia Episcopal belga, propone un ritual que incluye una oración y una bendición para la unión estable de personas de un mismo sexo.

También aclara que no es lo que “la Iglesia entiende por matrimonio sacramental”.

Según dicen los obispos en el texto, pretenden “estar pastoralmente cerca de las personas homosexuales” y ser una “Iglesia que acoja y no que excluya”.

El ritual que se sugiere se iniciaría con oraciones e incluiría el compromiso de las dos personas ante la familia y los amigos de serse fieles.

Finalizaría con más oraciones y lo que el documento califica como una “bendición”.

Hasta este martes a primera hora, el Vaticano no ha hecho comentarios al respecto.

Antecedente: el Vaticano les dijo que no sobre bendecir uniones homosexuales

A comienzos de 2021, respondiendo a preguntas formales de algunas diócesis católicas de distintas partes del mundo que buscaban saber su podían bendecir las uniones del mismo sexo, la oficina doctrinal del Vaticano, la llamada “Congregación para la Doctrina de la Fe”, determinó que no.

En ese momento, el Vaticano dijo que su decisión “no pretende ser una forma de discriminación injusta, sino un recordatorio de la verdad del rito litúrgico” del sacramento del matrimonio y la bendición que se le asocia.

En el documento, los obispos flamencos dice: que quieren “dar una respuesta concreta y sustancial al deseo de prestar una atención explícita a la situación de las personas homosexuales, sus padres y familiares”.

Y agregan: “El Papa Francisco también lo ha expresado explícitamente en su documento sobre la pastoral familiar Amoris Laetitia de abril de 2016, traducido como ‘La alegría del amor'”.

La iniciativa, encabezada por el cardenal Willy Bombeek,  apunta a que cada diócesis designe a alguien para brindar una atención pastoral focalizada en este ritual.

Respecto de la atención pastoral de las parejas del mismo sexo, los obispos belgas dicen que algunos “prefieren vivir en pareja, en relaciones duraderas y fieles. Ellos también merecen nuestro reconocimiento y apoyo, porque esta relación, aunque no sea un matrimonio religioso, también puede ser fuente de paz y felicidad compartida”.

Obispos alemanes, hace unas semanas, avanzaron en el mismo sentido.

En Infovaticana, medio ultracatólico, se critica la decisión de estos obispos diciendo: “En resumen, más obispos y cardenales se suman públicamente a difundir herejías, mala doctrina y confundir a las almas. Si Roma no ha actuado en Alemania, difícil parece que vaya a intervenir en Bélgica. Mientras tanto, se sigue tensando la cuerda y faltando a la unidad”.

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