Un 45 por ciento de los consumidores se muestra dispuesto a comprar productos o contratar servicios, si conocen del comportamiento ético de una empresa o marca, según datos de Mintel y Lightspeed GMI.
Mientras que si ocurre lo contrario, la sanción social se traduce en un 56 por ciento de consumidores que no comprarían o contratarían a empresas o marcas cuya conducta este relacionada con la falta de ética, por citar sólo un ejemplo de cómo puede afectar la reputación corporativa de forma efectiva a las organizaciones.
Las redes sociales se han convertido en plataformas con gran influencia en la imagen de una marca, por ello un tweet como el que se le adjudicó a la Directora Editorial de Vanity Fair México, Lourdes Garzón, podría impactar directamente en su reputación de marca.
Tan es así que la editorial Condé Nast México y Latinoamérica inició un proceso con la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México, en conocimiento de la Procuraduría General de la República, para dar con los responsables del dañino tweet en el que supuestamente Garzón llamó llorones a los mexicanos.
La editorial negó que las cuentas oficiales de Vanity Fair hayan sido vulneradas por hackers y argumentó que el tweet es apócrifo, por medio de un comunicado:
Esta situación se agravó cuando se reportó que presuntamente la directora editorial borró el tweet, entonces usuarios de redes sociales convirtieron el tema en tendencia, luego de protestar por la imagen de Melania Trump en portada de la revista, cuando la situación entre México y Estados Unidos era tensa.