Dos estudiantes de leyes y usuarias de iPhone entablaron una demanda en contra de Apple, al acusar a la compañía de obligar a los consumidores a comprar un iPhone nuevo.
Al más puro estilo de las historias que aparecen en series como The Good Wife o Suits, Stefan Bogdanovich y Dakota Speas entablaron una demanda al asegurar que nunca dieron su consentimiento a Apple, para reducir el rendimiento de sus dispositivos y ahorrar el gasto de la energía que proporciona la batería.
Esta demanda ocurre en un momento crucial para los usuarios de iPhone, luego de que Apple dio a conocer que el rendimiento de los teléfonos iPhone decreció para ahorrar la energía de la batería, sin contar con la autorización de los usuarios.
El hecho fue justificado por Apple, como una medida con la que buscó prolongar la energía con la que cuentan estos dispositivos, a cuenta de la experiencia de usuario y desempeño con el que cuentan.
El mercado tecnológico ha venido dando una serie de noticias que han puesto en alerta a los usuarios. Un incidente parecido ocurrió con el buscador Mozzilla Firefox aparentemente obligó a instalar el add-on Mr. Robort.
Este tipo de acciones nos llevan a observar la importancia que la tecnología tiene en nuestros días y el papel que juega la mercadotecnia en lograr, no solo mayor impacto, también resultados que permitan acciones que tienen al consumidor en el centro.
Aspecto de las reacciones en redes, por las polémicas baterías de iPhone:
A Apple le llueven más demandas por ralentizar iPhones viejos – https://t.co/8n9QI1Aqft –
Después de la primera demanda de Stefan Bogdanovich, hemos tenido noticia de otras dos demandas más que acusan a Apple de lo mismo, una de ellas colectivas: Ralentizar iPhones viejos par… pic.twitter.com/MAaQbffYcJ
— Dr Vicente Nario (@DrBicentenario) 22 de diciembre de 2017
