Tú me podrás decir, ¡Ah, pero eso es Norteamérica (específicamente EU y Canadá), no es el caso en el resto del continente!. Sin embargo, el fenómeno Unplugged, es mucho más fuerte y presente en Mexico y Latinoamérica (en general) que en los países del norte. ¿Las razones?: En EU y Canadá se da por comodidad y confiabilidad de cobertura y conectividad. Los Millennials encabezan esta tendencia de forma preponderante aunque esto se esparce a otros núcleos poblacionales, de ahí el declive en la venta de computadoras y la caída de contratos de telefonía fija. En México y Latinoamérica, el teléfono inteligente sin costo por contrato, más el bajo costo de las tabletas asiáticas, ha sustituido el paso natural a la conectividad tradicional vía (primero) una PC personal y un teléfono de oficina o casa. Los planes de prepago asociados a la omnipresente oferta de “tiempo airé” junto y la disponibilidad de redes inalámbricas libres en lugares públicos, permiten que cada persona, sin importar condición económica, pueda representar un individuo económicamente activo y localizable. Cualquier usuario es capaz y se encuentra habilitado para ubicar negocios y servicios mismos que, si no se encuentran armados de una estrategia de localización móvil, estarán fuera de la oferta local alejados de los desenchufados económicamente activos en crecimiento exponencial y constante.
Los bancos en varios países del continente (incluida Norteamérica), empezaron a detectar esta tendencia socio-económica al observar una bajísima actividad bancaria tradicional en grandes segmentos de la población afectando sus ingresos de intermediación amén de sus productos bancarios. Atentos a esto, se dedicaron ferozmente al desarrollo de aplicaciones seguras vía teléfonos y tabletas inteligentes, como el fotografiado de cheques para depósito o pago de servicios desde el teléfono y/o el pago por mensaje de texto. Pusieron en marcha campañas promocionales quirúrgicamente orientadas a los segmentos “desenchufados” (o desinteresados en la banca tradicional) a fin de obtener porciones de este pastel y convertirse, antes de que esto deje de ser una tendencia para convertirse en una recurrencia, en jugadores de primera división.
Búsqueda local. Si me encuentro a la hora de la comida en alguna parte del mundo buscando un restaurante, no consulto antes de ir o mientras ahí estoy el internet de mi laptop, hago en vez una búsqueda en Yelp misma que, asociada a mi auto localización geográfica y el filtro de “tipo de comida, tope de gasto y distancia máxima” me sugiere el mejor lugar; “se encuentre éste en las páginas amarillas o no; tenga página web o no”. Si conduzco un vehículo, la consulta la hago verbal vía el navegador asociado al GPS o, a mi asistente SIRI del iPhone. Aparte y antes de llegar, puedo reservar mesa en OpenTable asegurando disponibilidad. No está lejano el día que nos encontremos conectados a la gran red con una identidad tipo “MAC address” personal (media access control address), si no es que ya lo estamos sin conocer nuestra dirección. “Big Brother”
Estrategia: Desarrollar, paralelamente a las campañas digitales tradicionales, otras de mercadotecnia con orientación móvil que consideren (importantemente) la combinación de mapas y sitios de sugerencia tales como: Yelp, Google Pages, Facebook, MapQuest, Apple Maps, Bing, Yellow Book, y aquellas propias de las ciudades latinoamericanas y mexicanas donde estas campañas tengan impacto.
Poner en marcha accesos en sitios dedicadas a la obtención de “reviews” “robusta y sistemática”, así como, activar sistemas pro-activos de obtención de opiniones de clientes pasados, actuales y futuros ya que, los sitios de sugerencia funcionan para el cliente “no necesariamente por spiders” que llevan a “visitas”, sino por sugerencias reales… de clientes reales que influyen en el cliente potencial.
Considerar ingresar en el mundo del desarrollo de aplicaciones móviles relacionadas con los productos y/o servicios a efecto de crear seguidores en el segmento de los clientes móviles provocando fidelidad real asegurando un “bien raíz” en la pantalla del usuario móvil.
Por último, lo verdaderamente importante, como mencionaba en mi pasado artículo sobre las compras en tiempos difíciles, es desarrollar estrategias que se acerquen a esta porción incremental de la población no sólo en el ámbito de la mercadotecnia digital fija y móvil, sino en el mapa mental de todos los esfuerzos de crecimiento, promoción y posicionamiento de productos y/o servicios y… hacerlo antes de que sea demasiado tarde.