Desde hace algunos años, las marcas integraron ecotecnologías en su catálogo de productos, primero por tendencia, y ahora para sobrevivir en el mercado, ya que los productos de bajo impacto ambiental son la primera elección de consumidores a nivel global.
Así lo demostraron los últimos reportes financieros de Unilever y Procter & Gamble, cuyos productos sustentables representaron el 60 por ciento de las ganancias de ambas compañías, mientras que los que tenían un alto impacto ambiental eran los que tenían menores ventas y preferencias por parte del público.
Un análisis del Wall Street Journal refiere que la sostenibilidad en el consumo masivo ahora es una regla obligatoria para las marcas, ya que entre las marcas que innovan constantemente en sus productos son varias, como Stella Artois, quien constantemente organiza eventos denominados “buy a lady a drink”, donde al comprar una edición limitada, los consumidores financiaban por cinco años el acceso a agua limpia para una persona de escasos recursos.
De acuerdo con Anheuser-busch, la sostenibilidad es parte de las expectativas de las empresas hoy en día, ya que además de implementar acciones a favor del medio ambiente, las marcas también deben comunicarlo e integrarlo en sus estrategias de marketing.
Otro ejemplo es con Havas, agencia que promovió la sostenibilidad en sus eventos comprando compensaciones de carbono para reducir la huella de sus vehículos turísticos, promocionando materiales sostenibles y reciclados, cuyo movimiento creció durante la década de los 2000’s.
La industria retail también ha adoptado medidas ambientales, como Walmart, quien redujo el uso de energía en sus tiendas, mientras que Coca Cola bajó el gasto de agua en sus plantas.