Un original estudio de Big Data aplicado al mercado musical encontró que las propuestas de música clásica no empatan con las necesidades de las actuales audiencias.

El musicólogo español Miguel Ángel Marín tuvo a bien conducir un estudio de Big Data llamado “Reto al oyente: como cambiar tendencias en la programación de la música clásica”.

Dentro de su estudio descubrió una serie de pautas que se convierten en importantes lecciones, para todo aquel que quiere implementar una estrategia de Big Data.

-Se creativo en las fuentes de data que encuentras. Marín recurrió a Bach Track para alimentar su estudio.

– Construye contenidos arriesgados. El principal resultado de Marín fue encontrar que los programadores de música no salían de los clásicos compositores, por miedo a que las audiencias no respondan a nuevos creadores, por lo que se ha creado un vicio dentro de la industria de música clásica.

– Perfila a tu público. Conocer a detalle a la audiencia o consumidor al que te diriges, ayuda a encontrar alternativas que ayuden a tu negocio a permanecer activo.

El mercado de música se ha convertido en una industria evolutiva, que ha logrado pasar de vender cassettes, discos compactos a música en streaming y conciertos que ahora han logrado crecer su experiencia de la mano de la realidad virtual, con la colaboración de drones, visores y una amplia tecnología.

Aunado a ello, resulta indispensable descubrir el papel que juega el marketing para lograr que esta industria se transforme, entendiendo al consumidor digital, logrando sacar el mayor potencial de los nuevos desarrollos tecnológicos y entendiendo el poder que tiene la integración de acciones que explotan los estilos de vida y momentos de los usuarios.

A detalle.

IFPI estimó que el mercado global de música grabada alcanzó los 17 mil 300 millones de dólares, esto de acuerdo con una proyección que ha decrecido desde 1999, cuando alcanzó los 25 mil 200 mdd.