El fondo Dubai Albwardy Investment compró el Sheraton Iguazú Resort, uno de los hoteles más emblemáticos de Argentina. La transacción, según se informó, implica 55 millones de dólares.
El mismo fondo de inversión, dirigido por el jeque Ali Albwardy, ya compró en Argentina el Four Seasons Buenos Aires.
La idea es dejar la marca Sheraton (se convertiría también en Four Seasons), y tras realizar una fuerte inversión, llevar al hotel a una categoría de 6 estrellas, como el Burj Al Arab de Dubai.
El acuerdo se realizó a fines de 2016, pero recién trascendió ahora y se cerrará formalmente en septiembre de 2017.
“El hotel va a salir de la cadena Sheraton y podría pasar a la cadena Four Seasons ya que Albwardy maneja esa marca, pero no es seguro”, dijo Sergio Dobrusin, ex ministro de Turismo de Misiones a La Nación.
El Sheraton Iguazú (ahora ex Sheraton) tiene la ventaja competitiva sobre los demás de ser el único hotel dentro del Parque Nacional Iguazú. Desde sus jardines se puede ver la Garganta del Diablo, a sólo dos kilómetros. Además, como el Parque se definió luego de la construcción del hotel, ya no se pueden construir otros allí. Los más cercanos están a 25 kilómetros.
Su construcción data de 1978 y se hizo para la Copa del Mundo de Fútbol de ese año, que se disputó en la Argentina. El empresario Estanislao Kocourek fue su primer dueño y más tarde entró la cadena Sheraton.
Por sus habitaciones han pasado desde presidentes y reyes hasta estrellas del rock y figuras del deporte mundial. Es, sin dudas, el hotel que más celebridades internacionales recibió en el país. Allí durmieron el Rey Juan Carlos y la Reina Sofía, Roger Moore (filmó 007, Moonraker), Luciano Pavarotti, Michael Schumacher y Robert de Niro (mientras filmaba La Misión), entre muchos otros.