Londres.-. Celebridades, personajes de momento o mascotas que acompaƱan el dĆa a dĆa de los consumidores resultan grandes aliados dentro de las estrategias de comunicaciĆ³n de una marca gracias a la empatĆa que pueden generar entre el pĆŗblico objetivo. Pero, ĀæquĆ© pasarĆa si las grandes estrellas fueran remplazadas por delincuentes?
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De lo tradicional a lo digital. Evita caer en alguna de estas trampas.
La respuesta la tiene Harvey Nichols que, con un toque de humor y con la intenciĆ³n de dar a conocer las recompensas que ofrece su nueva aplicaciĆ³n mĆ³vil, utilizĆ³ algunas imĆ”genes de sus cĆ”maras de seguridad para poner al centro de su estrategia de comunicaciĆ³n a aquellas personas que roban dentro de los almacenes britĆ”nicos de la firma, claro sin revelar su identidad gracias a un arreglo de animaciĆ³n.
El spot estĆ” firmado por la agencia Adam & Eve/DDB London y se acompaƱarĆ” de ejecuciones impresas que irĆ”n sobre el mismo tono asĆ como acciones en punto de venta.
Lo hecho por la tienda minorista es un ejemplo de que para que una estrategia de comunicaciĆ³n logre ser diferente, en muchas ocasiones, basta con dar la vuelta a la forma en la que se aterriza un mensaje.