Internacional.- Damian Le Nouaille ha publicado el siguiente texto: “La única manera de que Instagram supiera esto era escuchar mis conversaciones desde el micrófono de mi smartphone”. Así empezaba el texto que está dando la vuelta en redes sociales. El joven, afincado en París, saltó a la fama hace unos días tras decidir, después de tener la intuición de que Instagram estaba escuchando sus conversaciones para usarlas con fines publicitarios, hacer un experimento que le llevó a escribir el texto.
Le Nouaille cuenta que un día, mientras estaba de excursión, habló con su primo de un micro proyecto que quería comprar y lo trataron en una conversación a viva voz pero dejó claro que nunca había buscado en Google ni compartido en cualquier plataforma digital nada referente a este producto.
El tema quedó ahí pero, al día siguiente, al entrar en su cuenta de Instagram se encontró un anunció del producto que estaba buscando. Hizo capturas de lo sucedido y contó su historia en Internet, dándose cuenta de que no era el único al que le había pasado algo parecido.
Según el especialista en ciberseguridad de la firma Kaspesky, su postura es intermedia respecto a esta asunto ya que asegura que “aunque haya muchas apps que han demostrado que, a través del micrófono se puede espiar a un usuario y convertir lo escuchado en información duda que Instagram lo haga ya que si fuera así, seguro que en sus términos de servicio la compañía se guardaría las espaldas y lo especificaría en alguno de sus puntos, pero no lo hace”, tal y como ha expresado en una entrevista con Teknautas.
Lo cierto es que son muchos los que opinan que el experimento no es del todo cierto ya que cuestionan detalles como que el teléfono del chico pudiese escuchar con claridad lo que hablaba si este lo llevaba en la mochila o que es imposible que alguien no se haya dado cuenta antes de que aplicaciones como Instagram procesa estos datos en tu teléfono y los manda a sus servidores sin permiso. Tal y como expresa el experto Enrique Sanz en su blog “si Instagram mandara cosas fuera sin nuestro permiso, ya alguien habría notificado y denunciado”.