Si un problema ha sido frecuente para Uber son las gracias, derechos y regulaciones que se relacionan con sus conductores y repartidores.
La marca ha estado en más de una ocasión en el ojo del huracán por este tema y es que, aunque queda claro que su servicio se ha con vertido en el sustento de muchas familias alrededor del mundo, también es un hecho que muchos gobierno, autoridades y organizaciones de trabajadores han considerado que la plataforma no garantiza de ninguna manera la seguridad ni bienestar de sus conductores, quienes son parte crucial del modelo de negocio.
Uber y las condiciones de trabajo
Para Uber, referente en el mercado, este tipo de cuestionamientos y asuntos no es nada nuevo. La empresa ha tenido que pagar cientos de multas e indemnizaciones por temas relacionados, mismos que, en meses recientes, lo llevaron a tomar una postura encontrada.
En meses pasados, una reciente columna firmada por el presidente ejecutivo de Uber, Dara Khosrowshahi, aseguraba que los trabajadores de la plataforma merecen disfrutar de “lo mejor de dos mundos”: beneficios y flexibilidad laboral.
En el mencionado artículo de opinión publicado en The New York Times, Khosrowshahi lanzó una propuesta a los legisladores para que exijan a las empresas que forman la llamada gig economy crear fondos de beneficios que entreguen a los trabajadores “dinero en efectivo que pueden usar para los beneficios que desean, como seguro médico o tiempo libre pagado”.
Esta postura es interesante luego que las autoridades reguladoras del estado de California diera a conocer la resolución sobre la nueva ley trabajadores bajo demanda de California, emitida a inicios de este año, pero que había sido apelada por Uber Technologies Inc y Lyft Inc, al ser las empresas más afectadas.
Lo cierto es que en otras partes del mundo esta lucha parece que ha comenzado a rendir frutos. En días pasados, los tribunales de Reino Unido acaban de rechazar una solicitud de Uber para desestimar la decisión de un caso de 2016. Como resultado, de acuerdo con Reuters, deberá concederle a un grupo de conductores la calificación de trabajadores, lo que les da derecho a ciertos derechos laborales tales como salario mínimo y ciertas prestaciones.
Sin lugar a dudas, este tipo de tensiones legales generan cientos de gastos para la empresa que ante la falta de movilidad en el mundo atraviesa por un momento tenso en términos de negocio e ingresos.
¿Un tiro en el pie?
De esta manera, Uber ha buscado todas las formas posibles para frenar cualquier asunto que se convierta en el principio de una nueva crisis alrededor de sus condiciones laborales.
Hace unos días se dio a conocer que Uber aparentemente habría obligado a Google a eliminar una app que podría afectar sus planes de desmarcarse de estas polémicas.
Se trata de la extensión UberCheats que permite a los conductores y repartidores de la plataforma saber cuando Uber les habría pagado menos de lo justo.
La prohibición de esta app fue denunciada por el creador de la misma, Armin Samii, quien explicó que Uber arremetió contra su creación al argumentar que violaba su marca, según ha publicado Vice.
Lo cierto es que ahora la propia plataforma de movilidad podría haberse dado un tiro en el pie con una encuesta realizada en Estados Unidos en la que preguntó a sus conductores cómo era trabajar en la aplicación y, como era de esperarse, los resultados no fueron nada favorecedores.
La plataforma realizó una encuesta en octubre pasado que fue enviada a todos los conductores del servicio que habría sido parte de la aplicación durante algún momento del 2020 para conocer sus opiniones sobre lo que era trabajar en Uber.
Con casi 100 mil respuestas, las conclusiones para no fueron nada favorecedoras. A decir de los resultados presentados por Qualtrics, firma que dirigió la encuesta, el 20 por ciento de los encuestados se dijo no satisfecho con conducir o realizar entregas para Uber y Uber Eats. El problema principal para el 27 por ciento de los conductores es la “confiabilidad de las ganancias”, que incluye tarifas y tarifas variantes, además de menos promociones e incentivos.
De la misma manera, el 15 por ciento de los conductores dijeron no estar satisfechos con la aplicación de Uber en términos generales, al tiempo que señalaron que es común que tenga fallas y errores con la ubicación GPS.
Adicional, 40 por ciento de los conductores afirmaron sentirse preocupados y desprotegidos frente a la pandemia, al tiempo que 19 por ciento afirmó que la capacidad de respuesta de Uber ante sus comentaréis es pobre.
Aunque Uber aseguró que creará un para repasar los resultados de la encuesta y ejecutar acciones para mejorar la experiencia de sus conductores y repartidores, lo cierto es que es que estos números pueden ser el clavo que hacía falta a la tumba de una marca que no ha encontrado la manera de garantizar los beneficios, seguridad e integridad de su principal fuerza de trabajo.