“En Ualá nos llena de tristeza la caída de Silicon Valley Bank. Si alguna startup o fondo en nuestros mercados (Argentina, Colombia, México) necesita ayuda financiera, bancaria u operativa durante este periodo de incertidumbre, estamos a disposición. Avisen”.
Las palabras pertenecen a Pierpaolo Barbieri y las escribió en su cuenta de Twitter (@pbarbieri) luego de que se conoció la caída del Silicon Valley Bank (SVB).
Ualá es una fintech argentina fundada y liderada por Barbieri (36). A lo largo de su corta vida, la empresa ya ha recibido varias rondas de inversiones, alcanzando más de 2.500 millones de dólares.
Es uno de los 10 unicornios argentinos –las compañías privadas con base en la tecnología que llegan a valer más de 1.000 millones de dólares–, junto con otras muy conocidas como MercadoLibre, Globant, OLX y Despegar.com.
También hay otras fintech argentinas más nuevas en ese selecto grupo de unicornios, como Auth0, Vercel, Aleph y Mural.
El ofrecimiento de ayuda del CEO de Ualá tiene que ver con que el SVB es (o era) un banco especialmente enfocado en prestar efectivo a las compañías de tecnología, por lo que su debacle está golpeando fuerte en el sector.
SVB se enfoca muy en especial en América Latina, lo que vuelve a su quiebra en un problema grave para algunas empresas en la región.
Ualá es una billetera digital que nació de la mano de George Soros y que busca convertirse en un ecosistema financiero en sí misma. Con más de 4 millones de tarjetas Mastercard, en 2020 desembarcó en México y un año después anunció un acuerdo estratégico con Wilobank, el banco digital de Corporación América.
En @uala nos llena de tristeza la caída de Silicon Valley Bank. Si alguna startup o fondo en nuestros mercados (Argentina, Colombia, México) necesita ayuda financiera, bancaria u operativa durante este periodo de incertidumbre, estamos a disposición. Avisen.
— Pierpaolo Barbieri (@pbarbieri) March 11, 2023
Unicornio al rescate de los clientes latinoamericanos del SVB
En los últimos 10 años, el SVB se había convertido en un actor clave en el sector tecnológico de Latinoamérica, brindando un apoyo fundamental a las nuevas empresas y empresas emergentes de la región.
La reputación del banco sobre saber comprender las necesidades de estas empresas, junto con su extensa red y recursos, lo convirtieron en un socio ideal para los empresarios latinoamericanos.
La presencia de SVB en América Latina se remonta a 2007, cuando abrió su primera oficina en Sao Paulo, Brasil.
Desde entonces, el banco expandió operaciones a otros mercados de la región, como México, Argentina y Colombia. Las sólidas relaciones del banco con inversionistas y empresarios locales lo han ayudado a establecer una presencia significativa en la región ya construir una sólida reputación como socio confiable para las empresas emergentes.
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