• Según Zariance, Twitter logró ingresos por 786 millones de dólares el primer trimestre de 2019

• Alrededor del 45 por ciento de la población en Estados Unidos utiliza esta red social

• En promedio, se generan seis mil posts cada segundo dentro de la plataforma

Aunque la muerte siempre ha sido parte crucial de la vida de los seres humanos, los sistemas digitales han dado un significado distinto a este fenómeno cultural. Gracias a redes sociales como Twitter y Facebook, información falsa o imprecisa sobre la muerte de grandes estrellas se transmite con mayor facilidad. Asimismo, como toda la información y el contenido que pasa por internet, el fallecimiento de personas relevantes también alimenta una infinidad de memes.

Pero dentro de la industria de las redes sociales, la muerte provoca un fenómeno interesante. Conforme la población fallece, cada vez más cuentas en estos sitios pertenecen a personas que ya no están activas, por decirlo así. De acuerdo con Time, en solo 50 años habrá más perfiles de gente muerta que viva en Facebook. Si bien otras plataformas como Twitter e Instagram tiene poblaciones más pequeñas, podrían estar en una situación similar muy pronto.

Esta situación ha provocado que algunas empresas hayan establecido parámetros concretos para preservar las cuentas de personas que ya han fallecido. Twitter no es una de ellas. Hace poco la empresa advirtió que, en diciembre, empezaría a eliminar aquellos perfiles que no hubieran sido utilizados en los últimos seis meses. Una consecuencia inesperada de la política sería, por supuesto, eliminar también las publicaciones de millones de usuarios fallecidos.

Que siempre no: Twitter revierte sus planes

Millones de usuarios activos llenaron la red social con protestas, exigiendo a la plataforma dejarles conservar las publicaciones de sus seres queridos. Tal fue la indignación de la gente que, de acuerdo con AdAge, Twitter decidió suspender temporalmente la purga de cuentas. Para calmar las críticas de los usuarios, la marca publicó un mensaje para toda la gente molesta. En él, aseguró que suspendería sus planes temporalmente hasta resolver este reto.

We’ve heard you on the impact that this would have on the accounts of the deceased. This was a miss on our part. We will not be removing any inactive accounts until we create a new way for people to memorialize accounts.

— Twitter Support (@TwitterSupport) November 27, 2019

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Twitter aseguró que nunca consideró que la eliminación de cuentas inactivas también significa borrar los posts de usuarios fallecidos. Así pues, prometió trabajar en un sistema que dejara a las personas conservar de forma permanente los perfiles de sus seres queridos. También dijo que, en lo que desarrollaba el sistema, no borraría ninguna cuenta o perfil inactivo. En días pasados, la red social mencionó que haría esta “purga” para liberar más nombres de usuario.

Creando un nuevo problema a futuro

No solo Twitter se ha retractado tras reclamos del público. Paramount Pictures, el estudio tras la nueva película live-action de Sonic, hizo caso a las quejas de fans y re-diseñó a la icónica mascota de Sega. Microsoft tuvo que rechazar una venta en reconocimiento facial este abril por quejas de defensores de Derechos Humanos. Kimberly-Clark tuvo que salir a desmentir a su director y decir que al final sí invertiría en México tras el llamado a boicot de la población.

El caso de Twitter es curioso porque abre una situación que puede volverse incontrolable en el futuro. En el corto y mediano plazo, es positivo que se le permita a la gente conservar las cuentas de sus seres queridos. Al final, las redes sociales se convierten en una forma para inmortalizar a personas que ya no están en el planeta. Esto puede ayudar no solo a aliviar el dolor. También es una forma de prestar respetos a la gente por sus acciones en vida.

Por otro lado, estas funciones solo son útiles cuando todavía quedan personas que recuerdan o quieren conservar la historia de estos individuos fallecidos. ¿Qué pasará cuando haya millones de perfiles en Twitter de gente sin conexiones con alguien vivo? Será necesario que las compañías de la industria empiecen a pensar cómo resolverán el problema. Si no piensan por adelantado cómo abordar este reto, podrían verse rebasados otra vez, igual que ahora.