El presidente Donald Trump volvió a rechazar una “colusión” entre Rusia y su campaña presidencial de 2016, en su primer comentario público desde que el ex asesor de seguridad nacional Michael Flynn se declaró culpable en una investigación federal sobre una posible conspiración.
“No hay colusión”, dijo Trump en breves comentarios a periodistas en la Casa Blanca antes de partir hacia Nueva York. “No hubo absolutamente ninguna colusión. Entonces estamos muy felices”, subrayó.
Flynn, un general retirado, se declaró culpable de mentir al Buró Federal de Investigaciones (FBI) sobre haber contactado a los rusos en nombre de Trump, y dijo que miembros del círculo íntimo del presidente estaban involucrados, y en ocasiones dirigiendo a sus contactos.
Su admisión, un delito grave de declaraciones falsas, lo convirtió en el primer funcionario de la Casa Blanca en ser acusado hasta el momento en la investigación criminal seguida por el fiscal especial Robert Mueller, sobre si la campaña de Trump y Rusia trabajaron juntos para influir en las pasadas elecciones en favor del presidente.
La declaración convierte a Flynn en una pieza clave a medida que los fiscales examinan una posible conspiración.
Los acontecimientos del viernes no resuelven la cuestión principal de la posible complicidad entre Trump y Rusia en la campaña, pero demuestran que Flynn mintió al FBI sobre múltiples conversaciones en diciembre pasado con el embajador ruso en Estados Unidos.
Los documentos judiciales dejan en claro que altos miembros del equipo de transición de Trump estaban al tanto del contacto de Flynn con funcionarios rusos en las semanas previas a la toma de posesión, según la cadena FOX.
Pese a que estos miembros no son nombrados en los documentos judiciales, personas familiarizadas con el caso identificaron a dos de ellos ante la prensa como Jared Kushner, yerno del presidente, y el exasesor de Seguridad Nacional K.T. McFarland.