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Se espera que las autoridades aprueben el contrato que el Pentágono le quitó a Amazon esta semana
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Pero la empresa de Jeff Bezos ha pedido que este proceso se detenga mientras se revisa su caso contra Trump
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En otras ocasiones, el presidente de EEUU ha demostrado su desagrado ante Jeff Bezos y las actividades de su compañía
El presidente de los Estados Unidos (EEUU) es una de las figuras más controversiales de todo el mundo. Y es que Donald Trump una y otras vez ha probado ser un agente un poco volátil. No solo se le estaba investigando por abuso de poder (un crimen del que se libró, gracias al apoyo de su partido). Asimismo, no teme iniciar problemas para marcas, expertos y países enteros. Entre ellos, Apple, Elon Musk, Huawei, Facebook, China y muchos otros agentes más.
De hecho, no es uno de los políticos más queridos ni en su país o el mundo. Según Five Thirty Eight, desde que inició su mandato, sus tasas de aprobación en EEUU se redujeron de forma notable, mientras que el rechazo a su gobierno ha escalado varios puntos. En cifras de Gallup, ni en sus mejores momentos la mitad del público está satisfecho con el trabajo de Trump. A escala global, en datos del Pew Research Center, más del 64 por ciento no le tiene confianza.
Por supuesto, una cosa es lo que opina el público sobre el ex-magnate y otra muy distinta la relación que sostiene con varios agentes importantes de la industria y el gobierno. Lo que es interesante es que Trump tampoco logra establecer alianzas con otros políticos ni marcas que podrían ser clave para EEUU. Por el contrario, parece dispuesto a utilizar la investidura como presidente para afectar el negocio de los que considera sus rivales. Un ejemplo sería Amazon.
Jeff Bezos quiere interrogar al presidente Trump
En octubre pasado, el Pentágono tomó una decisión valuada en 10 mil millones de dólares (mdd). Entonces decidió que Microsoft sería el proveedor de tecnologías en la nube para el Departamento de Defensa de EEUU. La determinación enardeció a Amazon, que dijo que había una orden directa del presidente Trump para detener afectar su negocio. Sin embargo, la empresa no fue capaz de probar sus acusaciones y tuvo que quedarse de brazos cruzados.
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Pero de acuerdo con AP, Amazon ya está lista para contraatacar. La empresa dijo que tiene la intención de interrogar a Trump en un proceso legal. Esto porque, en un libro de uno de sus ex-colaboradores, se dice que supuestamente el magnate le pidió al entonces secretario de Defensa, Jim Mattis, que “jodiera” a la marca con el contrato. No solo quiere que el presidente de EEUU testifique, sino que se despida a Mattis y otros oficiales involucrados con el caso.
Unas patadas de ahogado de Jeff Bezos
Como ya se dijo antes, las marcas y gobiernos de todo el mundo realmente no tienen una buena relación con Trump. En diciembre, el presidente de EEUU acusó a los gobiernos de Argentina y Brasil de manipular sus monedas. Poco antes, varias marcas se negaron a seguir el bloqueo que estableció el ex-magnate contra la tecnológica Huawei. Incluso se ha ganado la enemistad de sectores como el de los videojuegos, por sus declaraciones sobre los tiroteos.
Si bien es una acusación importante, es muy probable que Amazon tenga razón. El presidente de EEUU es culpable de prácticas más radicales que solo pedir aun subordinado “joder” con el negocio de una empresa. Por otro lado, también es importante recordar que el hombre salió, sin represalia alguna, de un proceso legal de impeachment. Y esto a pesar que mucha gente en su mismo partido aceptó que de hecho cometió una muy grave falta y un abuso de poder.
En este sentido, Amazon parece estar dando patadas de ahogado. Hay agentes mucho más grandes que la compañía de Jeff Bezos que han intentado tirar al presidente Trump y hacerlo responder por sus actos. Sin embargo, ni estos agentes han tenido éxito en esta misión. Así que es muy poco probable que la gigante de retail pueda obtener un interrogatorio con el ex-magnate, mucho menos ganar la demanda. Claro, nadie la disuadirá de al menos intentarlo.