El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, habló el miércoles de armar a los maestros de escuela para sumar seguridad en las aulas y evitar masacres como la de la escuela de Parkland (Florida) la semana pasada, que dejó como saldo 17 personas muertas.
El responsable de la Casa Blanca manifestó puntualmente que él apoya la idea de dar entrenamiento en el manejo de armas de fuego a algunos maestros y de permitir que las porten dentro de las escuelas. De esta forma, cree que se podrá disuadir posibles ataques en el interior de los centros educativos.
Textualmente expresó, según BBC: “Eso se llama porte oculto. Así un maestro llevaría una pistola oculta consigo, irían a recibir un entrenamiento especial y estarían allí”.
Sin embargo, disgustado porque muchos de los titulares de los medios estadounidenses dijeron que Trump quería “dar armas a los maestros”, el jefe de Estado salió a aclarar. Y lo hizo apenas despertó este jueves, y a su manera, en Twitter.
“Nunca dije ‘dar pistolas a los maestros’ como dicen las fake news de @CNN & @NBC. Lo que dije fue ver la posibilidad de dar ‘pistolas ocultas’ a maestros expertos en el uso de armas, con experiencia militar o con entrenamiento especial, sólo a los mejores”.
Y agregó: “Es el 20 por ciento de los maestros, como mucho, quienes podrían responder inmediatamente si un enfermo salvaje [como el de Parkland] llegara a la escuela con malas intenciones. Los maestros altamente capacitados también servirían para disuadir a los cobardes que hacen esto”. Y dijo que hasta era más barato: “A un costo mucho menor que utilizando guardias. Una escuela ‘libre de armas’ es un imán para las personas malas. ¡Los ataques terminarán!”
I never said “give teachers guns” like was stated on Fake News @CNN & @NBC. What I said was to look at the possibility of giving “concealed guns to gun adept teachers with military or special training experience – only the best. 20% of teachers, a lot, would now be able to
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 22 de febrero de 2018
….immediately fire back if a savage sicko came to a school with bad intentions. Highly trained teachers would also serve as a deterrent to the cowards that do this. Far more assets at much less cost than guards. A “gun free” school is a magnet for bad people. ATTACKS WOULD END!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 22 de febrero de 2018
A la idea la expuso al reunirse en la Casa Blanca con víctimas del tiroteo en la secundaria Marjory Stoneman Douglas. Al proponerla, Trump les pidió a los asistentes que dijeran si estaban de acuerdo, y hubo “más rechazos que apoyos”, asegura la BBC.
La propuesta de armar a los maestros no es nueva, y es respaldada desde hace tiempo por la polémica Asociación Nacional del Rifle (NRA), considerada como grupo de lobby más importante de este sector en Estados Unidos.
Entre los argumentos de Trump, esta frase: “Para un maníaco, las zonas libres de armas significan: entremos y ataquemos”.
Trump y su mkt político
Lo que aparentemente parece un exabrupto de Trump (uno más), es en realidad parte de su aceitada estrategia de marketing político. Su equipo de imagen sabe que para cosechar casi 59,9 millones de votos en 2015 no habló en tono conciliador, nunca lo hizo.
Sus frases “podría disparar a gente en la Quinta Avenida y no perdería votos”, “Un muro en la frontera con México nos ahorraría muchísimo dinero”, “México nos envía a la gente que tiene muchos problemas, que trae drogas, crimen, que son violadores”, “Este es un país en el que hablamos inglés, no españo”, “John McCain no es un héroe de guerra; prefiero a los que no han sido capturados”, generaron reacción de muchos sectores, pero no le restaron votos entre su electorado.
Los asesores de Trump podrían frenarlo y evitar que lance acciones como la de armar a los maestros, pero no lo hacen. ¿Por qué? Porque por ahora, alimentar al “monstruo Trump” sigue dando resultados.