Donald Trump parece haber sacado un beneficio de la 89 edición de la entrega de los Premios Óscar y ese fue llamarse “el responsable” por la distracción cometida en la entrega del galardón a la Mejor Película.
El presidente estadounidense dijo este lunes que la entrega de los premios Óscar “se concentró tanto en asuntos políticos que hubo desorganización al final”.
Fue “triste” que la ceremonia de premiación estropeara la coronación de “Moonlight” como la ganadora del Óscar a la mejor película después de que lo otorgaran inicialmente a “La La Land”, afirmó el mandatario.
“Fue triste que terminara de esa manera” la entrega de los premios de la Academia, afirmó Trump en una entrevista con Breitbart News.
El presidente asistió al Baile de los Gobernadores en la Casa Blanca la mayor parte del tiempo que duró la ceremonia de entrega de los Premios de la Academia.
Durante la entrega de los Óscar, el mandatario fue blanco de bromas del conductor de la ceremonia, el comediante Jimmy Kimmel, quien usó diversos momentos del evento para lanzar dardos sarcásticos.
Para el mandatario estadounidense a la premiación “no se sintió como una noche muy glamorosa”. “Le faltó algo muy especial”, agregó.