El precio del barril de petróleo lleva una escalada ascendente desde hace más de un año. Desde el piso que tocó en enero de 2016, cuando el Brent llegó a cotizar por debajo de los 35 dólares, el barril no ha dejado de aumentar hasta acariciar los 80 dólares en junio pasado, y este jueves 20 de septiembre.
Esta es una de las razones que llevaron a Donald Trump a exigir que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (Opep) baje los precios.
Lo hizo de la manera en que suele hacerlo el polémico presidente de los Estados Unidos: descargando su ira en Twitter.
“Protegemos a los países del Medio Oriente, no estarían seguros por mucho tiempo sin nosotros, ¡y sin embargo continúan presionando por precios del petróleo cada vez más altos! Nos acordaremos. ¡El monopolio de la Opep debe bajar los precios ahora!”.
We protect the countries of the Middle East, they would not be safe for very long without us, and yet they continue to push for higher and higher oil prices! We will remember. The OPEC monopoly must get prices down now!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 20 de septiembre de 2018
Así se expresó Trump en la red social de Jack Dorsey, amenazando a los países miembros de la Opep con “dejarlos solos”, a merced de los conflictos en Medio Oriente, si no hacen que el valor del barril descienda.
La Opep es un organismo internacional fundado en Bagdad, Irak, en 1960. Actualmente lo conforman 14 países, de los cuales cinco son miembros fundadores (Arabia Saudita, Kuwait, Irán, Irak y Venezuela). Desde 1965 tiene sede en Viena, Austria.
Con estas tensiones, como se esperaba, el precio de los futuros del Brent comenzaron a subir.
La polémica se da en el marco de las sanciones unilaterales de Estados Unidos contra las ventas de petróleo de Irán, el tercer principal proveedor de la Opep, que entran en vigencia el 4 de noviembre próximo.
Irán es un “muy importante productor y exportador” de petróleo, dijo el secretario general del grupo, Mohammad Barkindo, en un evento en la ciudad de Fujairah, Emiratos Árabes Unidos, este jueves, horas antes de que Trump tuiteara. “Cuando productores importantes tienen problemas con el suministro, es preocupante” para la OPEP y los consumidores, agregó.
El valor del crudo promedió cerca de 72 dólares a lo largo de 2018. A comienzos de septiembre, la Agencia Internacional de Energía (AIE) advirtió que los precios podrían superar los 80 dólares a menos que los otros productores compensen la oferta perdida de dos miembros de la Opep, Irán y Venezuela.
Presión sobre la gasolina
En la mayor parte del mundo, el precio de los combustibles líquidos está “atado” al valor del crudo. Según cada país, la ecuación que da por resultado el valor de la gasolina sufre un severo cambio cuando el petróleo sube.
En la Argentina, por ejemplo, el mercado de los combustibles se liberó luego de una década de haber estado controlado por el Estado, por lo que las petroleras trasladan los aumentos del crudo casi de forma automática.
De más está decir que el incremento de las gasolinas es un factor clave si se quiere contener el aumento de precios. La gran mayoría de los precios de una economía, especialmente en el tema alimentos, se rigen por los precios de la logística del transporte, y estos, por el de los combustibles líquidos, puntualmente el diésel.