Después de que el ex CEO de Uber, Travis Kalanick, renunciara a su puesto en la compañía que él mismo fundó, inició otra batalla en la mesa directiva entre accionistas que querían tomar el control total de la firma, ya que entre las quejas estaba que el ex directivo aún tenía poder de decisión.
Después de meses de batallar con los demás inversionistas de Uber, trascendió que su aún fundador, Travis Kalanick, está vendiendo casi un tercio de sus acciones, que equivalen a mil 400 millones de dólares.
Un reporte de Softbank refiere que Kalanick se separará del 29 por ciento de sus acciones, luego de que en meses anteriores buscara vender hasta el 58 por ciento, no obstante, la mesa directiva de Uber se lo impidió. Los únicos inversores que no han vendido sus acciones son: Lowercase Capital, Kleiner Perkins y Caufield & Byers.
Al parecer, el mismo Softbank estaría comprando el 15 por ciento de las acciones de Travis, mientras que otros coinversores de la firma financiera comprarían otro 3 por ciento adicional. Kalanick era el dueño del 10 por ciento de la compañía, pero analistas creen que su comportamiento es impredecible, ya que suele decir que no va a vender y en cuestión de horas hace lo contrario.
Y es que cada acción de Uber tiene un costo de 33 dólares por título en la transacción de Softbank, además de que el valor de la marca en el mercado asciende a 48 mil millones de dólares.