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Tanto políticos demócratas como republicanos utilizan Spotify frecuentemente para su publicidad
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De acuerdo con fuentes internas de la plataforma de streaming, estos anuncios no son parte importante de sus ingresos
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Según esta misma persona, el sitio de música en línea genera la mayor parte de su dinero a través de comerciales para cine y TV
Prácticamente todas las empresas e industrias en el mercado emplean la publicidad de una forma u otra. Alrededor de los deportes se unen un sinfín de marcas de consumo, desde las clásicas cervezas hasta artículos de aseo del hogar. También los gobiernos tienes un interés en transmitir mensajes a las audiencias, sean éstas nacionales o extranjeras. Pero un segmento muy interesante en este mercado es, sin lugar a duda, el que representan los agentes políticos.
La publicidad política es una de las que más genera ingresos para plataformas de distribución de contenido. Según el Hollywood Reporter, solo en Estados Unidos (EEUU) se cree que este segmento del mercado alcanzará ganancias por nueve mil 800 millones de dólares (mdd) para 2020. De acuerdo con Statista, tan solo la derrama económica del sector en redes sociales se espera que se logre un crecimiento de más de veinte veces entre el 2012 y el próximo año.
Claro que, en este notable crecimiento, no todo son buenas noticias. Muchos individuos, agentes defensores de la libertad de expresión y expertos democráticos no están nada felices con el estado de la publicidad política actual. En especial, con aquella que corre programática a través de las redes sociales. Ya muchos expertos han advertido que la situación podría llevar a una perversión de los procesos electorales. Pocas plataformas respondieron la advertencia.
Spotify, lista para prohibir la publicidad política
En este pequeño grupo de empresas de tecnología se cuenta la plataforma líder de la industria de streaming de audio. AdAge acaba de informar que Spotify dejará de aceptar este tipo de publicidad en su plataforma. La decisión empezará a implementarse a partir de 2020. Solo tendrá efecto en EEUU, que era el único país en donde la marca aceptaba esta práctica. Esto aplicará solo a los usuarios de su tier ad-supported, unos 130 millones de usuarios en el país.
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Mediante una declaración a AdAge, el sitio de streaming apuntó que empezará a pausar esta publicidad política a inicios del próximo año. Esto, porque todavía “no tenemos el necesario nivel de robustez en nuestros procesos, sistemas y herramientas para validar y revisar este contenido”. En este sentido, señaló que no se trata de una decisión permanente. Se volverá a considerar reincorporar la publicidad política a su sistema en una fecha futura, sin especificar.
Todo un reto para los agentes políticos
No solo Spotify se decidió a eliminar este tipo de publicidad de su plataforma. Twitter fue un pionero en este aspecto cuando, para octubre pasado, decidió eliminar, de forma definitiva, los anuncios políticos de su página. Google y YouTube también tienen ciertas reglas en contra de estos comerciales en sus respectivas plataformas, que se ejecutan con cierta transparencia. En abril, Facebook prometió un mayor control para estos contenidos, pero sin mucho éxito.
Son bastante claros los retos a los que se enfrentan las plataformas digitales cuando cierran sus puertas a la publicidad política. Al final, los partidos y candidatos a plazas en gobierno son anunciantes de gran poder adquisitivo. Así que, más que una decisión de negocio, este tipo de iniciativas responden a una cuestión de principios. Pero a lo que no se le suele poner mucha atención en este peculiar entorno es a las repercusiones para todos estos servidores públicos.
Las redes sociales y plataformas digitales son, con facilidad, la mejor forma como las marcas y agentes políticos pueden llegar a los consumidores y ciudadanos. Hay sitios, como Facebook, que se rehúsan a prohibir la publicidad de este tipo de sus espacios. Sin embargo, la iniciativa de Twitter y las acciones de Spotify y Google eventualmente podrían hacer que Zuckerberg se una a la tendencia. Y entonces, ¿cómo podrán estos servidores públicos darse a conocer?