Las relación entre las empresas empleadoras y sus colaboradores está por vivir un cambio importante. Esto va más allá de simplemente los modelos híbridos o de home office que se convertirán en la norma y el mejor ejemplo viene firmado de la mano de Burger King y lo que está sucediendo en Francia.
Lo anterior tiene que ver con las condiciones que se impondrán alrededor del proceso de vacuna y cómo la aplicación de esta medida preventiva se convertirá en una nueva condición laboral.
Condiciones alrededor de la vacunación
En principio es justo reconocer lo que está pasando en diversos países europeos y de otras regiones, en donde ante una tercera ola de contagios el cierre de actividades no es la opción, pero si lo es la vacunación obligatoria.
En este tipo de anublos, Indonesia fue pionera. Desde principios de este año, el gobierno de este país impuso la vacunación obligatoria con amenazas de multas o cortes de servicios públicos a las personas que se nieguen a recibir la vacuna.
Esta medida, ha sido replicada en otras naciones y ciudades. Por ejemplo, en mayo pasado, Arabia Saudita anunció que todos los trabajadores del sector público y privado que quieren regresar a sus lugares de trabajo presenciales deberán vacunarse, al tiempo que a partir del 1 de agosto, solo las personas con esquema de vacunación completo podrían ingresar a establecimientos gubernamentales, privados o educativos y usar el transporte público.
En la misma línea, Moscú implementó en junio que cafés, bares y restaurantes sólo podrán atender a personas que presenten su expediente de vacunación, de inmunidad o test negativo de coronavirus. Además lanzó un plan para que un 60 por ciento de los trabajadores del sector de servicios estén completamente vacunados antes del 15 de agosto.
Una de las grandes naciones en sumarse a esta tendencia fue Francia, en donde el presidente francés, Emmanuel Macron presentó un plan de acción en donde se estableció, entre otras cosas, que los trabajadores que no estén inmunizados no podrán acudir a sus puestos de trabajo y no cobrarán.
Aunque la normativa tuvo una rápida repercusión, con más de un millón de pedidos de turnos para vacunación y un récord de inmunizaciones en un solo día, con 792 mil 339 dosis aplicadas, lo cierto es que ha comenzado a generar reacciones entre las grandes marcas.
Burger King se alinea
Tal es el caso de Burger King, empresa que aparentemente, ahora se ha alineado a este nuevo mandato impuesto por Macron, lo que ha comenzado ha generar opiniones opuestas.
Desde redes sociales, ha comenzado a ser visible una supuesta circular firmada por Burger King en la que se indica que los trabajadores de la cadena que no estén vacunados y no tengan su pase sanitario no podrán trabajar más en los establecimientos de la marca.
Adicional se ha dicho que para los empleados de Burger King que no cumplan esta condición verán suspendido su contrato de trabajo al tiempo que su salario no se mantendrá.
El asunto no ha dejado de dar de qué hablar en redes sociales, en donde mientras algunos aplauden la decisión de Burger King de sumarse a las medidas de contención de contagios impuestas por el gobierno francés, otras tantas han llamado a un boicot en contra de la empresa.
Más allá de las reacciones contrapuestas, lo cierto es que este tipo de situaciones pone sobre la mesa una nueva serie de tensiones que se vivirán entre empleados y empleadores, efecto que podría llegar incluso al propio cliente final.
La comunicación alrededor de estos cambios será crucial para no ver afectada una relación que sin duda tiene un impacto en la experiencia que se entrega al consumidor.
Nota de BURGER KING: “Los trabajadores que a 31 de agosto no estén vacunados y no dispongan del Pase Sanitario no podrán trabajar más. Su contrato de trabajo será suspendido y la remuneración no se mantendrá”.¡¡¡BOICOT A TODOS LOS BURGUER KING DEL MUNDO!!! NO CONSUMAS EN NINGUNO. pic.twitter.com/gYgog7s6XL
— LOS POLÍTICOS SON NUESTROS ENEMIGOS (@rebellionis01) July 26, 2021
