Tras el accidente ocurrido en el parque de diversiones La Feria de Chapultepec, en el cual perdieron la vida varias personas, las autoridades de la Ciudad de México decidieron cerrar de manera indefinida las instalaciones del parque tanto por seguridad de la población como para hacer un peritaje a detalle acerca de los daños.

El resultado del peritaje arrojó que además del juego La Quimera, que presentó fallas que provocaron al caída de varios visitantes al juego, el resto de los juegos y atracciones del parque se encontraban con daños o faltos de mantenimiento.

Lo anterior fue determinado en la comisiones unidas de Protección Civil y Gestión Integral de Riesgos del Congreso de la Ciudad de México, donde la secretaria Myriam Urzúa señaló las malas condiciones del parque.

Pero el accidente y posterior cierre del parque de diversiones en el poniente de la capital mexicana no afecta sólo al local que permanece cerrado, sino al resto de parques de diversiones de la Ciudad de México, que según la autoridades, habrían disminuido en 30 por ciento sus ganancias desde el accidente ocurrido el 27 de septiembre pasado.

Ante la situación incierta que la Feria de Chapultepec tiene, las autoridades de la Ciudad de México han lanzado una convocatoria para poner a consideración de la ciudadanía el futuro de este local que desde hace más de cinco décadas ha funcionado como parque de diversiones.

La convocatoria se hace a través del sitio web Plaza Pública, en el cual el gobierno de la capital mexicana formula las siguientes preguntas:

• ¿Qué tipo de juegos y atracciones deberá tener?
• ¿Deberá estar dirigido para un grupo de la población en particular? Por ejemplo, niñas y niños de cero a seis años, adolescentes, o algún otro.
• ¿Debe permanecer la montaña rusa?

Así, el futuro de este parque tradicional de la ciudad de México, ha quedado, luego de la desgracia en la que ha caído, en duda y en medio de la incertidumbre que sugiere que al decisión está en manos de la población y del propio gobierno local.