A comienzos del mes de julio, un caso llegó a las noticias de todo el mundo. Fue cuando un cliente de la tienda Arteli, en un punto de venta de Tamaulipas, reclamó poder comprar 235 desodorantes por apenas 39,90 pesos.
¿Por qué? Por un error de sintaxis en la confección de una oferta. Habían escrito: “Todos los desodorantes Axe por 39,90 pesos” y el consumidor Carlos Rocha P. (como se identificó en las redes sociales) aprovechó el error y se llevó todas las latas del aerosol (las 235 que estaban en exposición), por lo que, en teoría, costaba una.
Este “problema” llegó al mundo en general y a la Argentina en particular, donde un reconocido hipermercado (“Libertad”) hacía habitualmente una promoción llamada: “Todo por 15 pesos”, donde un gran número de artículos se comercializan por esa cantidad de pesos argentinos (unos 85 centavos de dólar).
No hubo cambios grandes en la oferta desde que se conoció el caso de la tienda mexicana, sin embargo, se sumó un “pequeño detalle” a la hora de confeccionar la cartelería.
Ahora, debajo del “Todo por 15 pesos”, aparece la leyenda: “El valor de 15 corresponde a la unidad”. El objetivo es claro, no vaya a ser que a alguien se le ocurra la misma idea que a Carlos Rocha P. y termine llevándose miles de latas de cerveza, cientos de productos de limpieza o decenas de jabones por menos de un dólar.
Este tipo de errores son comunes en muchos puntos de venta y muchas veces son aprovechados por los clientes. En 2015, una mueblería de Torreón tuvo que vender una sala –que costaba 13.800 pesos– a 7,85; o en 2014 en Jalisco, cuando se comercializó una pantalla LED de 55 pulgadas a sólo 15,99.