El consumidor cuenta con mayor relación con las compañías business to consumer (B2C), ya que constantemente interactúan con ellas gracias a diferentes puntos de venta. Asimismo, este tipo de empresas se distinguen de las business to business (B2B) por dirigir sus esfuerzos al cliente final, por lo cual las redes sociales constituyen un canal óptimo para crecer y darse a conocer.
Las redes sociales representan un medio de comunicación que le permite a una empresa mantener comunicación con sus clientes, casi en tiempo real, sin embargo, para las compañías B2C estos sitios son un canal para que conozca al target y atraiga compradores potenciales por medio de diferente tipo de contenidos.
De acuerdo con Content Marketing Institute, para sobresalir en redes sociales, el 73 por ciento de estas empresas se basan en contenido creativo con el fin de crear engagement, asimismo un 58 por ciento se enfoca en determinar el tipo de contenido es que causa mayor impacto y sobre eso desarrollar estrategias.
Por su parte, un 55 por ciento apuesta por el contenido visual –fotografías, infografías y videos–, un 44 por ciento opta por buscar formas en las cuales reutilizar el contenido. Por último está la optimización de contenidos con un 43 por ciento, lo cual hace que los temas tratados cuenten con relevancia y así aumenten su SEO, impulsen las ventas y por lo tanto el tráfico, informa Search Metrics.
Sin embargo, no todas las redes sociales le proveen de igual presencia a las compañías B2C, por lo cual el 66 por ciento apuntan en que Facebook le otorga de mayor efectividad, seguido de un 53 por ciento de estas empresas que señala a YouTube y un 40 por ciento que opta por Twitter, a pesar de la mala etapa por la que está pasando, así como múltiples caídas.
Las redes sociales que se enfocan en la fotografía e imagen también tienen cabida en el tema, ya que Instagram es señalada con un 42 por ciento y Pinterest es señalado por el 39 por ciento. Al igual, dentro de la lista, figura LinkedIn con un 39 por ciento de menciones y Google+ en última posición con un 22 por ciento.
Esta tendencia global favorece tanto a empresas B2C como a B2B, cada una con diferentes tácticas de acuerdo con la forma en la que se desenvuelven dentro del mercado y los productos que comercializan.