• En varios países, el sistema Autopilot de Tesla ha generado críticas entre los reguladores

• Asimismo, hay una preocupación que la conducción autónoma, en su etapa actual, pueda provocar accidentes

• Lo anterior, porque muchos conductores pueden dejar de prestar atención, poniendo en riesgo su vida y la de otros

Los últimos meses han sido particularmente positivos para Tesla. Y es que la compañía de Elon Musk no solo ha conseguido mantener un más o menos aceptable nivel de ventas a pesar de la pandemia, al contrario de sus rivales. Además, sus avances en la tecnología de conducción autónoma la han ayudado a disparar el valor de su organización en el mercado bursátil. Sin embargo, no deja de ser una organización controversial, en términos de marketing.

De hecho, en información de Reuters, acaban de prohibirle a la automotriz transmitir varios de sus anuncios. Esto, porque se consideró que Tesla está distribuyendo “publicidad engañosa” sobre las capacidades de su sistema de conducción autónoma. La decisión fue tomada por las cortes en Alemania. El gobierno teutón apuntó que la compañía de Elon Musk ya no puede decir que sus automóviles tienen “el pleno potencial para la conducción autónoma” en spots.

Según las autoridades de Alemania, esta frase podría dar a entender a los consumidores que los automóviles de Tesla pueden conducir sin intervención humana. Y más importante, que dicha tecnología es legal en el país. Hay que recordar que los vehículos de la marca de Elon Musk sí tienen un sistema de asistencia autónoma. Sin embargo, son incapaces de conducirse solos. Más importante aún, siempre debe haber un conductor atento para tomar el control.

¿Un golpe que podría acabar con la racha de Tesla?

El tema de la conducción autónoma ha probado ser muy controversial a lo largo de los últimos meses. Además de la publicidad engañosa de Tesla, agentes como Mercedes-Benz y BMW han tenido que abandonar el desarrollo de esta tecnología, por su alto costo aún en alianza. Didi también está dedicando bastante dinero para desarrollar una flota de robotaxis, pero no estaría lista sino hasta 2030. Y a pesar de sus avances, Uber tampoco tiene un buen futuro.

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Pero el problema de Tesla no tiene que ver con tecnología. Si acaso, es tal vez la compañía que está más cerca de lograr la conducción autónoma nivel cinco. En este caso específico, la cosa es que la compañía de Elon Musk está usando un lenguaje ciertamente engañoso para vender sus modelos. Ya en otras ocasiones la empresa ha dicho que sus automóviles ya tienen el hardware para conducir solos. Lo único que falta es instalar el software, cuando se tenga.

Lo anterior no significa que Tesla pueda decir que sus automóviles tienen la capacidad de conducirse de forma autónoma. De hecho, este golpe de las autoridades de Alemania podría ayudar a cortar su racha de éxitos reciente. Si bien la compañía tiene el poder de apelar la decisión, tal vez lo más conveniente sería reformular su estrategia de marketing. Ahora que está en la cima, no parece algo muy prudente irse a la guerra contra el gobierno de Berlín.

Consecuencias de la publicidad engañosa

En el tema concreto de dar información poco clara a los consumidores, Tesla no es la única marca que ha cometido esa misma equivocación. Al nuevo modelo de Ferrari se le acusó de hacerle promoción a la tabacalera Philip Morris International, sin permiso. Ryan Toys Review, un niño youtuber, también recibió una demanda por promocionar juguetes a menores de edad. Y AT&T también fue forzada a eliminar la marca 5G Evolution de su versión mejorada del 4G.

¿A qué consecuencias se pueden atener Tesla y estas otras marcas por usar publicidad engañosa? De acuerdo con ISS, está el evidente riesgo de demandas, multas y procesos legales muy caros con las autoridades. Pero de acuerdo con Chron, también puede llevar a que los consumidores tengan una peor visión de la empresa, una vez que su oferta no cumpla con lo prometido. Y según WeWork, ayuda a cimentar una reputación negativa de la marca.