El regulador de calidad de China informó este lunes que Tesla llamará a revisión en ese país cerca de 8 mil 898 vehículos Model S en el país a partir del 28 de junio.
Tesla ha estado llamando a revisión voluntariamente los vehículos sedán Modelo S construidos antes de abril de 2016 para reemplazar unos tornillos en el componente de dirección asistida.
El retiro voluntario sobre los pernos de dirección asistida corresponde a 123 mil Modelo S que hay en el mundo, debido a que los pernos pueden corroerse después del contacto de ciertos tipos de sal de la carretera en climas fríos.
La firma automotriz lo ha hecho mediante un correo electrónico, advirtiendo que el sistema de dirección asistida corre el riesgo de oxidarse, y ha llamado así a revisión de forma voluntaria a los modelos afectados.
Lo que provoca el problema es la sal que hay presente en las carreteras con nieve y temperaturas bajas.
De hecho, lo que causa el problema son unos tornillos fabricados por la marca Bosch, que forman parte de todo el sistema de la dirección asistida. Las sales de calcio o magnesio son especialmente malas para este componente, aunque la oxidación solo sucederá en aquellos climas más extremos.
Los modelos afectados son aquellos que se han fabricado antes de abril de 2016, y la llamada a revisión se ha hecho a usuarios de todo el mundo, pero sin ser obligatoria.
Tesla ha advertido que no existe ningún peligro, y que en caso de oxidación, no se rompería el volante ni se desprendería, ni tampoco se vería comprometida la seguridad. Lo único que quedaría afectado es la dirección asistida, es decir, mover el volante se podría convertir en todo un deporte para tus brazos, ya que el Model S pesa más de 2 mil kilos.
Por suerte, el problema solo se encuentra con el Model S, y el resto de vehículos de Tesla no presentan ningún inconveniente.