• Este rescate no contempla el crédito de cinco mil millones de euro que aún está pendiente solo para la marca Renault

• Se espera que este mes, la gigante automotriz presente un plan de recortes valuado en dos mil 200 mdd

• De ser del agrado del gobierno francés, se le podrían liberar los recursos para sobrevivir a la crisis económica

Uno de los mercados que más ha sufrido por la actual pandemia de COVID-19 ha sido el de la industria automotriz. Para casi cualquier marca en este sector, el problema ha sido doble. No solo la gente no tiene intención de comprar nuevos vehículos, debido a la prohibición a salir y el miedo a una recesión. Ni siquiera puede lidiar adecuadamente con la poca demanda porque no puede producir nuevos coches. Así pues, la esperanza de muchas empresas es un rescate.

También ésta era la situación de Renault. El gobierno francés hace unos días aseguró que, sin un plan económico de apoyo, la marca podría hasta desaparecer. Ahora por fin se ha llegado a un acuerdo y parece que la empresa está segura después de todo. Al menos así lo apunta AP, pues reporta que la administración de Emmanuel Macron anunció una inyección de ocho mil 800 millones de dólares (mdd) a la industria. Pero el plan es más ambicioso que un crédito.

Para empezar, el rescate beneficiará no solo a Renault. También los rivales de origen nacional de la marca, Peugeot y Citroen, van a poder recibir parte de los recursos. Los consumidores aparte podrán aspirar a un bono de 12 mil euros, que podrán dedicar para la compra de un nuevo auto eléctrico. El plan de Macron está enfocado a convertir a Francia en la “productora número uno de coches eléctricos en Europa”. Para 2025, se producirán un millón cada año.

Un proyecto más allá de la marca Renault

El sector automotriz no es el único desesperado por ayuda del gobierno para superar la difícil situación financiera. J.C. Penney y J.Crew se declararon hace poco en bancarrota, con la idea que el gobierno de Estados Unidos (EEUU) les ayudara a paliar su situación financiera. Adidas también solicitó a Alemana un préstamo para que la marca pudiera salir del mal paso. También la aerolínea Lufthansa le significará un golpe de nueve mil 800 mdd para el gobierno en Berlín.

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Pero es muy interesante lo que Francia está haciendo para apoyar tanto a Renault como al resto de la industria automotriz nacional. El gobierno no se está limitando a apoyar una marca que es crucial para el crecimiento económico de su país. Además tiene un plan integral que se ha orientado a incrementar la potencia de su mercado a nivel regional. La belleza de esta idea no recae solo en la visión a futuro, sino que podría ser el mejor camino a una gran reactivación.

Varios gobiernos están gastando millones en rescatar a una u otra marca que deben sobrevivir para poder sostener al país en el futuro. Pero en la gran mayoría de estos planes, solo se ha visto el problema desde el lado de la oferta. Francia, con sus créditos directo a consumidores, también está asegurándose que vaya a haber una demanda. Por supuesto, será un plan más caro de ejecutar. Pero ayudará a que la confianza de la población se recupere aún más rápido.

Iniciativa privada vs proyectos públicos

Si bien algunos países han mostrado su interés en apoyar a cualquier marca que así lo pida, en el caso demás de una marca se han tenido que encontrar caminos alternativos. Por ejemplo, si bien Airbnb también le apuesta su futuro a un préstamo, éste se le solicitó directamente a sus inversores. Dentro de México, Bimbo y Uber han decidido apoyar a sus aliados con fondos y recursos propios, a veces en especie. Hasta Grupo Modelo ha creado un sistema de créditos.

Las iniciativas de cada marca son loables, pero podrían no ser suficientes para poder controlar la gran crisis económica que se avecina. De acuerdo con el IPI, se tendrían que otorgar líneas de crédito a todas las cuentas bancarias del país, para asegurar la liquidez de empresas y de individuos. The Hill cree que hay que priorizar la atención a enfermos y desempleados. Por su lado, Global Policy Forum apunta que se deben crear aún mejores planes preventivos a futuro.