Los consumidores siempre se fijan en que un producto se vea bonito o tenga un bello empaque. Compran influenciados por emociones y apariencias. Es por ello que para generar un mejor empaque se tiene que profundizar más en el tema y no solo tomar como referencias las tendencias, tal como lo sugirió el vocero de Barcel en su conferencia en el 4º Congreso Nacional de Mercadotecnia, donde señal que “se trata de entender las tendencias de parking y capitalizarlas considerando las necesidades de la marca y su público meta”.
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Además, el ponente enumeró las tendencias del empaque que se deberían de considerar:
-Congruencia: comunicación integrada que tenga coherencia desde el empaque hasta las estrategias de marketing.
-Simple es más: que hable concretamente sobre lo que ofrece la marca.
-Apelar a lo emotivo: jugando con diversos recursos que apelen a la emoción del consumidor.
-Diseño elaborado: con diversos elementos atractivos y fuertes pero congruentes.
-Diseño amigable: que el mensaje que difunda sea positivo.
Además, enlistó siete tips básicos para hacer sobresalir a la marca a través del empaque:
1.-Sencillo gusta más
2.-Daño reversible (mostrar el producto más atractivo)
3.-Formas orgánicas
4.-Jugar con los símbolos
5.-Mostrar en el empaque el producto
6.-Cuidar detalles
7.-Realizar un buen brief
Definitivamente con los aspectos antes mencionados podemos llegar a la conclusión de que el neuromarketing debe estar presente más que nunca, y no por una temporada sino porque esto tiene que ver mucho con las nuevas tendencias de neuroeconomía. El papel de la neuroeconomía consiste en poder explicar desde la neurociencia cómo el cerebro humano resuelve problemas y se enfrenta a la toma de decisiones.
En el mundo de las decisiones, frecuentemente, se tiene que reflejar la existencia de oponentes inteligentes que buscan la maximización de las ganancias. En base a ello surge el NeuromarKeting, que en primera instancia debemos entenderlo como algo ajeno a un proceso de manipulación o comportamiento humano y el cual pretende favorecer y ayudar a que se ofrezcan mercados de calidad y competitivos.
Comprender el mundo del Neuromarketing requiere antes que nada de encontrar una teoría correcta y basada en la Economía para poder describir los comportamientos individuales y colectivos de una determinada sociedad. Asimismo, se necesita también comprender teorías cerebrales y analizar el uso de nuevas tecnologías de imagen para poder entender la afectación emocional e impulsiva. Por último, se debe saber saber cómo el cerebro humano procesa emociones atravesadas por significados y no informaciones que es lo que hace el cerebro humano cuando la gente consume o aprende.
Kevin Randall, director de estrategia de marca e investigación en Movéo Integrated Marketing, define el neuromarketing como “la práctica de usar tecnología para medir la actividad cerebral en los consumidores para utilizar esa información en el desarrollo de productos y comunicaciones”.
Con esta breve comparación pretendemos que el momento cumbre de crear empaques, sea estudiado y no se base únicamente en tendencias. Podrá sonar un poco arriesgado, pero el consumidor busca productos de calidad con empaques bonitos y no simplemente un empaque que los conquiste.