Emplear herramientas y tendencias del pasado, modelos de negocio caducos y métodos de trabajo obsoletos para predecir un futuro que cada vez se acelera, más nos puede traer muchos dolores de cabeza.
Eastman Kodak se declaró en banca rota en 2012 después de haber inventado y rechazado la cámara digital, mientras Instagram era comprado por Facebook en un billón de dólares, después de estar 3 años en el negocio y contar con sólo 13 empleados. La compra de YouTube por parte de Google en menos de 18 meses, la valuación de Uber en más de 20 billones de dólares dos años después, Groupon etc… nos hacen pensar que la competencia ya no viene de China o India, sino de algún garage con 2 tipos siguiendo una idea disyuntiva financiándose con sus tarjetas de crédito.
Las organizaciones actuales deben ser lo suficientemente escalables, rápidas y suficientemente inteligentes para tener un crecimiento exponencial, cosa que antes no era posible. Cada vez se requieren menos recursos y tiempo para crecer un startup de una manera más agil, con métodos que hagan énfasis en la satisfacción del consumidor, desechando todo lo que no ayude a ese fin. Actualmente se estima que la vida de una Compañía de entre las 500 de S&P sólo tiene 15 años promedio de vida.
Cada vez vemos más empresas que emplean mecanismos externos para nivelar su capacidad de producir riqueza, como recursos tercerizados incluso para procesos de misión crítica, cada vez dependen más de su comunidad de seguidores y de la información que éstos les proveen. Amazon Web Services, AirBnB y Uber nos han demostrado que no es necesario ser dueño de nuestros propios servidores, cuartos de hotel y autos para crecer un negocio billonario.