El 25 de enero pasado celebramos el Día Mundial de la Publicidad y es buen momento para recordar la gran importancia de esta industria/arte/disciplina en diferentes ámbitos: el económico, el social, el cultural, en la moda, la tecnología, la historia y en la práctica creativa, entre muchos otros.

Una disciplina que ha sobrevivido a guerras, crisis y pandemias y que sigue estando cada vez más viva, porque las tendencias y la velocidad de la tecnología la van empujando con fuerza a buscar identificarse de manera más efectiva con las personas a las que les llegan los mensajes publicitarios cada día y en sus diferentes formas.

Den una vuelta a cualquier libro de historia o documentales de History Channnel. La publicidad ha estado ahí, en menor o mayor medida y de diferentes formas.

Desde el papiro del comerciante egipcio Hapu, en Tebas, (donde ya presentaba un “copy” interesante para su negocio: “…Se ofrece media pieza de oro a quien dé información acerca de su paradero. A quien lo devuelva a la tienda de Hapu, el tejedor, donde se tejen las más hermosas telas al gusto de cada uno, se le entregará una pieza de oro”), pasando por el año 1625, cuando el periódico británico Mercurius Britannicus publicó su primer anuncio publicitario, hasta los grandes avances de la Inteligencia Artificial y su aplicación en los mensajes actuales, la publicidad ha sido, y es, un reflejo de la sociedad y un producto cultural.

¿Cuántos no se han emocionado con esas grandes historias que son contadas en un minuto, en treinta segundos o hasta en menos tiempo a través de la televisión, el cine o con la gran fuerza de la imaginación ocupada en la radio? ¿O quién no se ha quedado “embobado” frente a un buen anuncio exterior por su gran arte, fotografía o un genial copy?

Yo puedo ser uno de esos casos, cuando desde hace muchos años me veían como bicho raro al yo estar emocionado porque estaba por llegar “La Noche de los Publívoros”, donde me encantaba, dentro de esa sala del Metropolitan, devorar las horas y horas de esos spots que provenían de todo el mundo. ¿Quién demonios se iba a sentar 6 horas a ver solamente anuncios, cuando la mayoría hace zapping en su TV cada vez que hay un corte comercial? …YO, “El Freak Publiglodita”.

Pero la publicidad sigue en constante cambio y transformación, tal como cambian los intereses, comportamientos y costumbres de la gente a la que les hacemos llegar los mensajes. Esto es un “cuento de nunca acabar”. Y que bueno que lo es, porque ahí radica la emoción de la profesión. Mucho está inventado en la publicidad, pero no todo está creado. Siempre hay algo por descubrir y crear.

Y las tendencias van dando el camino para saber por dónde empezar a crear y desarrollar estrategias en los medios, en los mensajes y en las formas de acercarse al protagonista de todos nuestros esfuerzos.

En especial, hay cuatro tendencias tecnológicas a usarse en la publicidad de este año que se deben observar, de acuerdo a la empresa de datos, insights y consultoría Kantar:

1.- El potencial tecnológico de la Televisión Conectada

Tendrá mayor importancia la relación entre la publicidad y el streaming. Netflix, Disney+ o HBO Max ya están dando el primer gran paso. Y el aumento de los espectadores de TV Conectada lo confirma:
El 47% de los internautas de México son espectadores de TV Conectada (35 millones de personas)

Kantar señala tres claves para no adoptar malos habitos al respecto de esta tendencia: controlar la frecuencia y mantener creatividades de calidad, comprender que nos encontramos en un entorno de audiencias fragmentadas, y gestionar la publicidad en televisión conectada junto a la lineal, siempre conjuntamente y no por separado.

También señala que, a pesar de la proliferación del uso de las multipantallas (móvil, tabletas y computadoras), la TV sigue siendo el centro del entretenimiento en el hogar.

2.- Product placement, pero dinámico

El product placement tendrá gran importancia. Tan solo en Estados Unidos ya está presente en un 75% de los programas de las cadenas. La clave es que sea un product placement dinámico, que con los datos adecuados, permitirá mostrar anuncios personalizados a diferentes espectadores. Existe el riesgo de un impacto negativo si un product placement se ubica fuera de lugar, sea incongruente o molesto. Además, debe ser objeto de regulación, informando a los espectadores que el contenido ha sido adaptado.

3.- El auge de los mundos virtuales

Ya se están empezando a ver las ventajas de los mundos virtuales y empresas como Apple, Microsoft, Meta o Epic están desarrollando la infraestructura tecnológica. Un 61 por ciento de los anunciantes ha declarado ya su intención de aumentar su inversión en 2023 en ésta práctica.

El Metaverso puede ser la novedad, pero aún es pronto y es aún escasa la exposición a este mundo y hay que prestar mucha atención a lo que la gente quiere en realidad del metaverso, además de saber si tiene el acceso al hardware necesario para entrar a ese mundo virtual.

4.- El gaming, un canal creciente para la publicidad

En tecnología, además del Metaverso, está la publicidad in-game. Las agencias creativas se inclinan cada vez más por los videojuegos de producciones más grandes (los llamados AAAs o Triple As) o por aquellos visualmente más llamativos para llegar a nuevas audiencias.

Hay que considerar que con casi 3,200 millones de ‘gamers’ en 2022 y un gasto total combinado de 196,800 millones de dólares, hay una gran oportunidad de añadir los videojuegos, incluyendo a plataformas de enorme crecimiento en fechas recientes, como Twitch, al plan de medios.

Estimad@ lector@; ¿a poco no es emocionante estar en el mundo de la publicidad?

Gracias San Publicito y Santa Publicita por mostrarme el camino del bien y haber elegido ser un Publiglodita.