Para todos aquellos colegas que aún se encuentran en la universidad o iniciando su carrera profesional en el fascinante mundo de la mercadotecnia, es muy probable que se les presente la seductora oportunidad de especializarse o de iniciar una aventura laboral en el mundo digital, que si bien se encuentra de moda y en boca de todos, intrigante y un tanto

misterioso, representa sin duda el futuro de todo lo hagamos para satisfacer demanda.

Estamos hablando de técnicas que se encuentran en constante evolución y no tienen más de 8 años de existencia, por lo cual no se dejen engañar: Aun no existen “gurús” en markering digital. Ni siquiera Philip Kotler lo domina. Para no ir más lejos: Los creadores de Twitter desconocían los alcances de su creación cuando lanzaron su invento. Lo mismo ocurrió con Instagram, que inicialmente fue creado como un foro de nicho para fotógrafos en iphone, muy distinto a lo que es ahora.

Existen varios autores, muy buenos algunos, que han logrado entender el alcance de las diferentes herramientas digitales, sin embargo el sentido común es fundamental, esencial y altamente valioso para estos nuevos medios.

Basado en mi experiencia con el tema y algunos textos que he leído, me permito recomendar al lector considerar las siguientes competencias o habilidades antes de decidir sobre incursionar totalmente en el mundo del marketing digital:

Apertura a nuevos medios
Mercadotecnia digital no es igual a redes sociales. Si el lector no comprende esto se va a frustrar ya que hablo de un medio más para vincular contenidos inteligentes con audiencias base de valor y entretenimiento. Un Community Manager efectúa labores esenciales para construir dichas audiencias, sin embargo existen varios recursos digitales que no deben descuidarse, como paid media (display, SEM, remarketing, etc), eMail marketing, SEO, Web, entre otros.

Gusto por el análisis de datos
La mercadotecnia digital, a diferencia de las herramientas offline, puede medirse en todos sus medios. El profesional en mercadotecnia digital debe traer o desarrollar el gusto por el análisis de datos, los cruces de información y cierto manejo matemático, para identificar las oportunidades emergentes y, muy importante, para no dejarse engañar por proveedores o agencias charlatanes que suelen manipular las cifras para sus clientes, aprovechándose de su bajo conocimiento de los indicadores digitales.

Afición por la tecnología
Muy probablemente me estará leyendo un “millennial”, que prácticamente nació con un iPad en la mano y no concibe en mundo sin internet. Aun así es importante contar con una legítima afición por la tecnología, cuyo ritmo es alto en cuanto a innovación. La ausencia de este gusto podría provocar un rezago o el no aprovechamiento de las oportunidades que se presenten.

Alto grado de curiosidad
Estamos frente a nuevos medios y constantes avances tecnológicos. La curiosidad es competencia esencial para el mercadólogo digital, tanto para identificar tendencias como para crear nuevas de su propia mano. Estamos ante un mundo nuevo y un tanto “virgen”, donde la creatividad, la iniciativa y la validación de estrategias podrían generar grandes resultados. Será importante que toda acción generada por curiosidad o experimento sea acompañada de un análisis o test posterior. Recordemos que aquí todo se mide y los números dicen mucho.

Capacidad de integración con el mundo “offline”
Finalmente, y no menos importante: La mercadotecnia tradicional no dejará de existir. Por eso se hace fundamental que el profesional en mercadotecnia digital sea capaz de integrar su agenda y sus estrategias a la misión general del negocio y a los medios tradicionales. Recordemos que una de las funciones del marketing digital es “extender el alcance de los medios no digitales”. Si no se logra un trabajo en conjunto, el mercadólogo digital correrá el riesgo de fracasar en la misión general de todo negocio: Vender.