• Para adaptarse a las tendencias de los consumidores, las marcas y empresas cada vez más se apoyan en lo sustentable como promoción.

• Para 69 por ciento de consumidores, la reputación ambiental de una empresa afecta sus decisiones de compra.

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Nada es estático: el mundo, las personas y, por supuesto, el marketing cambian. Ya sea como una forma de adaptarse a las tendencias o de crear maneras equivalentes de tener nuevas perspectivas y acciones, las marcas y empresas cada vez más se apoyan en la idea de lo sustentable para llegar al público.

Debido a su repetición esto se convierte, poco a poco, en un gran movimiento por parte de marcas y consumidores.

Así, en la actualidad, cada vez más consumidores y marcas vinculan sus actividades y actitudes individuales o personales en acciones sustentables. Por un lado, mientras que las marcas analizan hacer movimientos mercadológicos a favor de temas o tópicos como el cambio climático, por ejemplo, los clientes y las personas modifican sus gustos para hacer del planeta un mundo mejor a futuro. Esto es algo que ha crecido considerablemente.

Para los negocios, puede resultar complicado, pero lo cierto es que lo sustentable está en múltiples segmentos: alimentos, ropa, tecnología, transporte, servicios, etc. En este sentido, el consumo no se detiene y ahora es más constante. Las empresas y las marcas tienen que tomar en cuenta este tipo de situación si quieren seguir siendo relevantes.

Los compradores, al satisfacer sus necesidades en cualquiera de los niveles de consumo posibles, se dan cuenta que es él mismo consumidor quien replantea la forma en la que está comprando y consumiendo, lo que también se traduce en la manera en la que se desarrollan las estrategias y tácticas de las empresas.

Objetivo: crear un consumo sustentable

El aumento sobre la preocupación del impacto climático en los consumidores es consistente. De acuerdo con los resultados de algunas encuestas realizadas por Gallup Inc. se demuestra que, hasta marzo del 2018, para el 64 por ciento de encuestados el calentamiento global se debe a las actividades humanas: un aumento de 9 puntos respecto al mismo análisis realizado en marzo del 2015.

Eso significa que los puntos de vista de las personas han cambiado. Y de una manera muy importante. De hecho, cada vez más empresas empiezan a esclarecer la importancia de mejorar el medio ambiente dentro de sus propósitos y propuesta corporativa.

Marketing sustentable: a favor de las necesidades del cliente

En cuanto a temas como la organización y la forma de presentarse ante los consumidores, el marketing sustentable diseña y comercializa productos que generen un beneficio a los compradores sin causarles daño, ni al medio ambiente.

Al respecto, de acuerdo con Research Gate, al menos 69 por ciento de estadounidenses dice que la reputación ambiental de una empresa afecta sus decisiones de compra. En B2B, el 82 por ciento de líderes dice que la sustentabilidad es importante para la toma de decisiones de índole corporativa.

Según Cone Communications, la actitud, percepción y comportamiento de los usuarios influyen en la forma en la que se comunican hacia los consumidores. De acuerdo con estas cifras, 87 por ciento de consumidores indica que compraría un producto porque una empresa aboga por un problema que les importaba y más del 75 por ciento se negaría a comprar un producto si descubren que una compañía apoya una tendencia negativa.

El caso de Netflix

Como cualquier otra compañía, Netflix necesita energía eléctrica para crear contenido. Sin embargo, también, como cualquier otra empresa, está dejando una huella ecológica que, en comparación con otras plataformas, parece que está superando la barrera para acercarse a los consumidores por medio de esta estrategia.

3 acciones que impactan en la producción de contenidos

• Reducir el impacto ambiental

Lo que resulta del consumo de energía eléctrica se mantiene constante. La electricidad que se usa en Netflix, por ejemplo, para las oficinas y los depósitos, es la mínima e indispensable. La empresa trabaja de manera directa para mejorar el consumo con Certificados de Energía Renovable. Por ejemplo, en 2018, el consumo directo de energía de Netflix fue de aproximadamente de 51,000 megavatios por hora (MWh).

• Producción de contenidos

Por otro lado, para producir contenidos, Netflix usa electricidad indirectamente a través de otras plataformas, como Amazon Web Services o los proveedores de Internet que ofrecen su contrato por paquete. Aunque reducir esta huella es más complejo, ya que está fuera del control de una empresa, el objetivo es conectarse con una audiencia por medio de esta actividad.

En 2018, el 100 por ciento del consumo de energía no renovable, tanto directo como indirecto, se equilibró con distintos proyectos de energía. Esto fue implementado en Estados Unidos, dentro algunas ciudades como Alabama, Alaska, Arkansas, Florida, Georgia, Misuri , Montana, Nebraska, Oklahoma por mencionar algunas.

Al mismo tiempo, se ejecutaron proyectos de energía renovable en otros países: Australia, Brasil, Canadá, Chile, China, Colombia y Japón.

• Evaluación consistente

Netflix se esfuerza para ser sustentable en sus operaciones diarias y la manera en la que presenta sus contenidos. Este enfoque funciona para conocer la escala de consumo actual. Por eso, evalúa constantemente su impacto ambiental y exploran nuevas oportunidades para mejorar la sustentabilidad, conscientes sobre cómo impacta para llegar al usuario.

Por medio de una evaluación, donde incluso los usuarios pueden consultar dichos informes a través del programa Green Power Partner de la EPA (Agencia de Protección Ambiental) de EE. UU., se refuerza el nivel de engagement con la energía renovable que se obtiene.

El propósito principal es fomentar una iniciativas ecológicas.