La decisión los supermercados ecológicos SuperSano, parece haber puesto a pensar a otras grandes cadenas, que han decidido o se lo plantean, dejar de vender productos que contengan entre sus ingredientes el aceite de palma. Es el caso de Alcampo y Eroski que se suman a la tendencia.

El en caso de Alcampo, desde un comunicado han informado que “En Auchan Retail España estamos trabajando con nuestros proveedores con el objetivo final de eliminar el aceite de palma de nuestras marcas propias en todas aquellas referencias en las que tecnológicamente sea posible sustituirlas, y asegurando, en las que no, que dicho aceite proceda de fuentes sostenibles”.

Por su parte, la cadena Eroski analiza tomar una decisión parecida, como parte del Plan de Mejora Nutricional que viene implementado esta empresa de distribución que manifestado que: “se está estudiando una reducción del aceite de palma de nuestros productos”.

Y es que las campañas sobre los efectos nocivos de este aceite, para la salud, por su alto contenido de grasas saturadas, un 50 por ciento, que son un factor importante en la formación del colesterol considerado ‘malo’, han comenzado a tener efecto. Después de todo, se trata de un ingrediente muy utilizado en productos de consumo masivo como las galletas, chocolates, bollería, congelados y precocinados por citar sólo algunos.

En Europa, estas cadenas no son las primeras en poner en práctica medidas de este tipo, pues la italiana Coop ya lo hizo lo propio hace poco, al igual que marcas como Barilla, que lo ha eliminado de sus ingredientes, después de la publicación de un estudio de la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), en el que se relacionaba el aceite de palma con la aparición de cáncer en sus consumidores.

De hecho este mismo estudio, provocó una crisis de marca a Nutella, debido precisamente a la gran cantidad de este aceite que lleva entre sus ingredientes y que ha tratado de rebatir explicando que cumplen con las normas de EFSA, gracias a su procesamiento que evitaría la aparición de las sustancias cancerígenas.

Por si fuese poco, la producción de este aceite es señalada como la causante de la deforestación de grandes extensiones de bosques tropicales del sudeste de Asia y de África, con las graves consecuencias ecológicas que ello implica. De allí que cada vez menos marcas y retailers parecen dispuestos a que sus productos se asocien a este aceite.