- Lidl en España amplió su estrategia en puntos de venta.
- La “bolsa antidesperdicio” es el último lanzamiento. Se vende a 3 euros.
- También amplió hasta el 50% el descuento para productos próximos a vencer.
Los supermercados están implementando nuevas estrategias para evitar el desperdicio de alimentos que están próximos a caducar o que no cumplen con los estándares estéticos convencionales.
En los últimos años, estas prácticas han cobrado fuerza debido a las preocupaciones sobre el desperdicio de alimentos y la sostenibilidad ambiental.
Además, a los consumidores les interesan esta clase de productos porque se colocan a precios de oferta, lo que les permite ahorrar en sus compras.
Una de las estrategias más populares entre los supermercados es ofrecer descuentos en productos que se acercan a su fecha de vencimiento.
Los descuentos suelen rondar el 50%, lo que permite a los compradores adquirir artículos a una fracción de su precio original.
Por ejemplo, una investigación realizada por la Federación Nacional de Comercio Minorista (NRF) de los Estados Unidos, se halló que el 63 por ciento de los supermercados ofrecen descuentos en productos que se acercan a su fecha de vencimiento.
La encuesta también reveló que estos descuentos son más comunes para productos frescos, carne y productos lácteos.
Algunos supermercados han comenzado a asociarse con organizaciones que distribuyen el exceso de alimentos a las personas más necesitadas.
Lo que hacen es donar alimentos que están a punto de caducar o que no cumplen con los estándares tradicionales. El problema es que las leyes de los países no son todas iguales y esta clase de acciones no están permitidas en algunos.
“Bolsa antidesperdicio”, la última estrategia en los supermercados
Un interesante ejemplo de esta clase de estrategias es la que lanzó esta semana Lidl en España, donde ya se comercializa la “bolsa desperdicio” (así la llaman).
La bolsa incluye productos frescos, básicamente frutas y verduras, que no cumplen con los estándares de belleza convencionales pero que son totalmente aptos para el consumo.
En las bolsas hay artículos que proceden de empaques averiados o que, como explica Lidl: “Han padecido alguna clase de desperfecto sin verse dañados en la calidad”.
Antes del lanzamiento en todo el país, la cadena low cost hizo una prueba que duró dos meses en las Islas Canarias, que fue un éxito.
En el test de Canarias, Lidl consiguió vender más de 20 mil kilos de frutas y verduras que de otra forma hubiera arrojado a la basura.
Meses antes, otra tienda, Bene Bono, desembarcó en el mismo país su negocio de venta de frutas y hortalizas que antes fueron rechazadas por razones estéticas
Lidl, desde 2022, también vende al 50% panes producidos el día anterior y productos en el último día de caducidad (también al 50% del precio original).
En este caso, hasta antes del último cambio, el supermercado ofrecía descuentos del 30% en artículos frescos cerca del vencimiento.
Ahora lee:
Entrevista exclusiva con Alejandro Caballero, Director senior de Mercado Libre
Rolex vende tanto, que ya abrió fábricas provisionales
Laboratorio NYCE invirtió $USD 2.3 millones para seguir con estrategia nearshoring