El trabajo que hacen las marcas en los canales digitales sigue cobrando relevancia. Al mismo tiempo, conforme avanza y se proyecta su uso por los usuarios, el social media sigue consolidándose como una parte de las estrategias de marketing debido a su participación en los hábitos de consumo de los usuarios.

La respuesta de las marcas ha sido efectiva. Su migración a este tipo de medios, en plataformas como Facebook, Twitter o Instagram, demuestran la capacidad que tuvieron diferentes segmentos e industrias para adoptar las nuevas funciones digitales en sus campañas de marketing.

El problema se da en la diversificación del público que hace uso de las redes sociales. De acuerdo con Social Bakers, 93 por ciento de personas compran productos de marcas con base en la recomendación de otros usuarios. De este modo, se refuerza la idea de que el contenido generado por las marcas no está funcionando y contar una historia como lo hacen los propios usuarios podría marcar la diferencia.

Statista indica que el 74 por ciento de los usuarios a nivel mundial considera que el tipo de contenidos más influyentes son aquellos que cuentan historias personales. Por lo tanto, el trabajo de las firmas en sus canales sociales es contar una historia. Enfocarse en la forma en que construyes un negocio y la forma en que logras un impacto real es con una gran narración de historias.

CÓMO CONTAR UNA HISTORIA EN SOCIAL MEDIA

La noción de contar historias no ha cambiado, pero sí los medios a través de los cuales se cuentan. Esto es lo que debes considerar:

• La atención del consumidor social. Se encuentra en constante evolución, ahora tienes que contar una historia de maneras nuevas e interesantes en lapsos que van desde los 6 segundos hasta los 60. El tiempo es fundamental.
• Llamar la atención en varias plataformas sociales. Las personas abren su smartphone y lo primero que ven es un catálogo de plataformas sociales en su menú de Home. En eso tienes que enfocar tu energía, en adaptarte a cada una.
• Saber lo que busca el usuario. Actualmente, vivimos en una cultura bajo demanda y como consumidores y comercializadores, tenemos que reconocer eso. No sólo es arrojar información al azar, hay que conocer lo que busca tu audiencia para contárselo.
• Generar una respuesta. En un mundo donde hay una gran cantidad de contenido social, si no haces que alguien deje de hacer lo que está haciendo, ya sea con una acción o una emoción, vas a perder.
• Expresa tu mundo real. Si tú adoptas una filosofía en la que puedes expresarte de forma adecuada por medios sociales, puedes ganarte a la audiencia. Las historias se crean y describir tu viaje, ideas, acciones, ansiedades o ambiciones sobre lo que puedes lograr podría ser efectivo.