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La carta es atribuida al equipo legal de la marca en el país y es un interesante caso de cómo una gran cadena como Starbucks actúa ante pequeños competidores.
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Con este tipo de acciones, marcas como Apple también se han enfrascado en querellas contra pequeñas marcas mexicanas, por el luso de nombras.
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La carta que circula en redes esta semana prueba el reto que tiene emprender hoy en día en una industria como la cafetera.
Tras la publicación de esta nota, Starbucks compartió la siguiente postura:
“En Starbucks hemos realizado inversiones significativas para desarrollar nuestra marca y propiedad intelectual durante los últimos 50 años. Poseemos una cantidad sustancial de propiedad intelectual, incluida nuestra marca comercial FRAPPUCCINO, y otros derechos sobre el nombre y las marcas comerciales de Starbucks. Tenemos la obligación legal de proteger nuestra propiedad intelectual de infracciones para conservar nuestros derechos exclusivos sobre ella. Starbucks trabajará con cualquier tienda que utilice la marca registrada FRAPPUCCINO para ayudarlos a seleccionar nombres que no infrinjan la ley y que coincidan con sus propias identidades de marca”
Starbucks México tiene una curiosa misión, misma que se ha denunciado en redes y demuestra cómo sus abogados actúan contra las cafeterías que usan la marca Frappuccino. Por medio de correos electrónicos pidió a las cafeterías que lo hacen, retirar la palabra o símiles fonéticamente de sus menús y publicidad.
Uno de estos casos fue denunciado por Café del Sol a través de su cuenta de Facebook, donde advierte lo siguiente:
“Hemos recibido un correo de la firma de abogados (C&L Attorneys, según el membrete) que representa los intereses de Starbucks Corp. en México, emplazándonos a retirar de nuestro menú el uso de la palabra Frapuccino, Frapuchino, Frappucino y todas aquellas similares fonéticamente con las mismas por tratarse de una marca registrada desde el año 1994 por este corporativo”.
La carta mostrada por la pequeña cafetería yucateca, detalla el emplazamiento a desistir y retirar los nombre para uso, venta y promoción relacionada con la marca, todo esto en cualquier formato publicitario, ya sea físico o digital, expresa el documento firmado por Aranzazu Ortiz Orgambinde.
Tras la amenaza legal, la cafetería anunció que llamará “Frappé de café” sus bebidas heladas, comentando de forma irónica, que esta no se encuentre registrada para evitar nuevas amenazas.
Los primeros casos de la carta legal enviada por Starbucks a diversas cafeterías se ha registrado en el estado de Yucatán.
Frappuccino, marca registrada
Frappuccino es una palabra que cuenta con al menos 17 registros, tanto en trámite como activos en el Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual, tal como consta en una rápida revisión al momento de redactar esta nota.
El registro está a nombre de Starbucks Corporation y solo uno de estos registros se encuentra a nombre de, INTERNACIONAL DE CERAMICA, S.A.B. DE C.V., que describe la marca (Frappuccino) registrada de la siguiente forma:
“Pisos (no metálicos). excluyendo construcciones, transportables no metálicas, monumentos no metálicos, casa, edificios, condominios, fraccionamientos, excluyendo expresamente materiales de construcción”, cita parte de su registro.
Una amenazante carta, pero una poderosa lección
Las cartas de alerta legal como la enviada por la firma de abogados a una pequeña cafetería yucateca, revela un caso muy importante, la importancia que tiene entender las reglas del comercio cuando se emprende un negocio en México.
Starbucks está en su derecho de defender el uso de su marca Frappuccino, pidiendo a una pequeña cafetería que desista en su uso, sin embargo, lo que resulta interesante de ello es la necesidad que tienen estos locales de conocer las reglas con base en las cuales deben pensar sus comercios.
El momento de Starbucks
Starbucks vive un interesante semestre como marca, pues la famosa cadena de cafeterías enfrenta en México la denuncia por parte de pequeñas cafeterías, del envío de una carta, mientras que en países de América Latina enfrenta el boicot de consumidoras, tras saberse la implementación de una política, que ayuda a empleadas embarazadas en su decisión de abortar.
El momento que vive la cadena estadounidense es muy interesante y con ello comprueba un elemento, estas marcas tienen una fuerte presencia en nuestras vidas diarias y dicha trascendencia tiene sus responsabilidades ante el consumidor.
